El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha realizado un informe sobre los resultados del Plan de Seguros Agrarios 2000, en el que se destaca el pago de las indemnizaciones realizadas, a consecuencia de los siniestros que han afectado a las producciones aseguradas durante ese año y que han ascendido a un montante de 21.348 millones de pesetas, que se corresponden con un total de 95.967 actas de tasación. El año 2000 puede encuadrarse como un año de baja siniestralidad, ya que sólo ha habido un 63% con respecto al año anterior y la superficie afectada ha sido de 640.309 ha, un 51% inferior a la de 1999, que alcanzó 1.312.961 ha. En cuanto a la distribución por riesgos, la sequía ocupa el primer lugar con casi 250.000 ha, seguida del pedrisco, con algo más de 233.000 ha, lo que supone entre los dos un 75% de la superficie afectada. En tercer lugar se sitúa la helada, de la que se han contabilizado 56.000 ha. dañadas. Por Comunidades Autónomas, la de mayor siniestralidad ha sido Andalucía con algo más de 150.000 ha, y dentro de ella, la provincia de Sevilla, con un 46%. La segunda más afectada ha sido Castilla y León, destacando Palencia con un 46%. A muy corta distancia, Aragón, con algo menos de 100.000 ha., de las que el 57% corresponden a Zaragoza. Las Comunidades Autónomas de menos siniestralidad fueron el País Vasco y Asturias. El coste total de la contratación de Seguros Agrarios, que afectó a una producción de 27,7 millones de toneladas, supuso 55.823 millones de pesetas, de las cuales 21.613 millones fueron subvencionadas por ENESA.
GABINETE DE PRENSA