Nota de PE
El informe fue aprobado por 526 a favor, 95 en contra y 32 abstenciones.
La reducción del consumo, el incremento de las importaciones y los precios a la baja son algunos de los rasgos que en la actualidad caracterizan el mercado de frutas y hortalizas de la UE. Para acabar con esta situación, la Comisión Europea presentó en enero una propuesta de reglamento que tiene como objetivo reforzar la competitividad del sector. El texto otorga mayor importancia a las organizaciones de productores, integrando las ayudas existentes en el régimen de pago único por hectárea (independiente del volumen de producción).
Otras ideas principales son preservar mejor el medio ambiente y fomentar el consumo de estos productos, sobre todo entre los jóvenes. La intención de la CE es llevar a la práctica estas propuestas sin incrementar el presupuesto.
El informe del Parlamento, cuya ponente es la española Mabel SALINAS (PSE), acoge favorablemente las líneas generales de la propuesta de la CE. No obstante, aboga por unas ayudas más flexibles y mejor adaptadas a las necesidades de los productores, sobre todo en los períodos de crisis.
Período de transición: hacia el pago único
Los diputados establecen un período de transición para integrar el sector de las frutas y hortalizas en el régimen de pago único. Este período transitorio «terminará el 31 de diciembre de 2013 y los Estados miembros podrán decidir, a más tardar el 1 de agosto de 2008, aplicar los nuevos pagos» (enmienda 113).
La Eurocámara también especifica que el régimen de ayuda previsto en el reglamento anterior -derogado mediante el presente reglamento- se seguirá aplicando en la campaña en las campañas de comercialización 2008/2009 y 2009/2010 (enmienda 119).
Ayudas flexibles: producciones de cítricos, tomate y ajo
El informe establece disposiciones especiales para determinados sectores, entre ellos el de los cítricos. La legislación actual que regula el sector de las frutas y las hortalizas establece que se concederá un importe adicional de ayuda a los agricultores que reciban pagos directos. En su propuesta, la CE establece una serie de límites máximos nacionales para estos importes adicionales. En el caso de España, los diputados proponen aumentar estos límites en 37,5 millones de euros por año hasta 2010 (enmienda 123). El objetivo de esta medida es lograr un reparto más equitativo de las ayudas a los cítricos.
También se establecen disposiciones específicas para el sector del tomate destinado a la transformación. En este caso, para las campañas de 2008, 2009, 2010, 2011, 2012 y 2013, «podrá retenerse hasta el 50 % de los límites máximos nacionales (…) con objeto de conceder una ayuda a la superficie a las organizaciones de productores reconocidas cuyos adherentes cultivan tomate de industria» (enmienda 114). De ser así, el Estado miembro tendrá hasta el 1 de septiembre de 2007 para fijar el nivel de retención.
En cuanto a la producción de ajo, la ponente subraya que «se concederá una ayuda a la superficie para los productores tradicionales de ajo». Para hacerla efectiva, los Estados «comunicarán a la CE el volumen de hectáreas cultivadas en las zonas tradicionales con el fin de establecer una superficie máxima garantizada, que se dividirá entre los países miembros» (enmienda 118). El objetivo de esta ayuda es lograr una solución permanente a la «competencia desleal» que sufre este sector frente a las importaciones procedentes de China.
Los diputados también piden que se introduzca una ayuda específica por hectárea para las fresas, las frambuesas, las cerezas y las grosellas. El Parlamento votó a favor de que esta ayuda sea de 230 euros por hectárea y se aplique a las producciones de una superficie máxima garantizada de 130.000 hectáreas (enmienda 132). En un principio, la comisión de Agricultura propuso conceder un importe de 120,75 euros por hectárea para las producciones con una superficie máxima de 165.000 hectáreas, pero hoy los diputados decidieron incrementar la cantidad.
Fondo de seguridad para crisis
El Parlamento destaca que el sector de frutas y hortalizas se caracteriza por la «inestabilidad de sus mercados y, en caso de hundimientos de precios, el sistema actual de retiradas del mercado tiene limitada su eficacia como red de seguridad de las rentas de los productores». Por este motivo, aboga por la creación de un fondo de seguridad financiado de forma separada de los programas operativos de las organizaciones de productores.
La ponente considera que tienen que ser los Estados miembros los que instauren estos fondos, de los que dos tercios estarían financiados por la UE (con la posibilidad de utilizar el 0,5% de las reservas nacionales) (enmienda 61) y un tercio por las organizaciones de productores.
Estos fondos también estarían abiertos a los productores que no son miembros de las organizaciones de productores (enmienda 19).
No a las restituciones a la exportación
Los diputados rechazaron durante el voto de hoy una enmienda (número 20) de la comisión de Agricultura favorable a mantener las restituciones a la exportación, «que siguen siendo una herramienta útil para aumentar las exportaciones comunitarias de frutas y hortalizas a determinados terceros países», decía la enmienda.
Reforzar las organizaciones de productores
La Cámara considera necesario reforzar las organizaciones de productores y aumentar el número de productores que se unen a ellas. Para conseguirlo, la ponente pide que la cofinanciación de los fondos operativos se incremente desde el 50% hasta el 60% en algunos casos, tales como la fusión de varias organizaciones de productores (enmienda 62). También se recomienda elevar el límite de las ayudas comunitarias a estas organizaciones hasta el 6% del valor de la producción comercializada (enmienda 69), frente al 4,1% que proponía la CE en un principio.
Cifras y estadísticas
Según el estudio de la CE «Major Features of the sector of fresh fruits and vegetables in the UE», publicado en abril de 2006, las frutas y las hortalizas representan el 16,6% del total de la producción final agraria de la UE de 25. Durante el período 2003-2005, la UE produjo una media de 38,3 millones de toneladas de fruta, con Italia y España como principales productores con una participación conjunta superior al 50 %. En ese mismo período, la UE produjo una media de 66 millones de toneladas de hortalizas, con Italia como primer productor (24% del total de la producción), seguida de España (19%) y Francia (12%). Las adhesiones de Bulgaria y, muy en particular de Rumania, han reforzado la importancia productiva del sector con 1,1 millones toneladas anuales de más. La UE de 27 es actualmente el tercer productor hortofrutícola del mundo con el 8,3% del total, después de China (35 %) y la India (10 %).
Los intercambios (intra y extra comunitarios) equivalen al 32,6% de la producción de hortalizas frescas y al 54,5% de las frutas frescas (excluidas las tropicales), lo que explica la creciente importancia del comercio para el desarrollo del sector. El mercado comunitario constituye el principal destino, con el 86% de las entradas de hortalizas y el 65% de las de frutas (incluidos los cítricos).
Parlamento Europeo