El secretario provincial de COAG, Andrés Góngora, como el secretario provincial de Asaja, Francisco Vagas, se mostraron tajantes en su determinación, que esperan que sea apoyada por los agricultores almerienses, con los que han fijado encuentros en El Ejido y Almería para trasladar la iniciativa.
«Vamos a demostrar nuestra dignidad y vamos a mandar en lo nuestro», manifestaron desde ambas organizaciones agrarias, que indicaron que, debido a los precios actuales, los agricultores «no llegan a cubrir los costes de recolección», por lo que auguran un «fuerte respaldo» por parte del campo andaluz.
De esta forma, aunque desde Asaja y COAG no se propusieron precios «mínimos» que consideran que «deben derivarse de la negociación con las comercializadoras», sí detallaron que el coste mínimo que admitirán para la comercialización de los productos es de 30 céntimos de euro por kilo.
De este modo, «se llegaría a cubrir los costes de producción», aunque se trata de una cuantía que se revisaría «semana tras semana», dada la circunstancia actual de cotización en origen, que no llega al mínimo planteado.
Según apuntó Vargas, desde el inicio de la campaña se han llevado a cabo reivindicaciones por parte del sector como la manifestación que tuvo lugar el pasado día 21 de noviembre en Madrid, otra manifestación que tuvo lugar en Almería el 8 de octubre o la destrucción del 30% de las producciones de pepino y berenjena.
Los agricultores, que señalaron estar dispuestos a establecer un diálogo con la Asociación de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas de Andalucía (Aproa), con la Asociación de Empresas Cosecheras Exportadoras de productos Hortofrutícolas de Almería (Coexphal) y con la Asociación de Empresarios Comercializadores Hortofrutícolas de Almería (Ecohal), no descartaron establecer contactos directos con las empresas comercializadoras para regular su situación.
Estas organizaciones defendieron la «calidad» de la producción y apuntaron a que, en estos momentos, existe un equilibrio entre la oferta y la demanda de productos hortofrutícolas.
«Desde aquí se mandan camiones de hortalizas a Europa sin precios, lo que destroza el modelo productivo», criticaron Asaja y COAG, que profundizaron en que «no hay más margen de maniobra en las negociaciones», ya que no se comercializará «sin un precio mínimo», una medida que, de no ser tenida en cuenta, llevará a los agricultores a declarar impagos a las administraciones y entidades financieras, según Vargas.
Europa Press