El responsable de frutas y hortalizas de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Andrés Góngora, denunció ante el comité que los productores de frutas y hortalizas están «completamente expuestos al mercado, padeciendo las presiones de la gran distribución y de las importaciones a bajo precio», un hecho que les obliga a afrontar crisis de precios «cada vez más frecuentes, menos predecibles y más virulentas».
Góngora destacó asimismo la necesidad de un «nuevo sistema de gestión de crisis grave» que permita afrontar las crisis generalizadas en momentos claves, que no pueden atacarse desde las organizaciones de productores.
Por su parte, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) consideró prioritaria la existencia de un mecanismo de regulación de crisis, que sea accesible para todos los agricultores, independientemente de las ayudas a la gestión de crisis a través de las organizaciones de productores, cuyos fondos calificó de «claramente insuficientes».
En este sentido, Asaja argumentó que, en productos como el limón, el agrupamiento en organizaciones de productores no llega ni al 15%, razón por lo que consideró que las medidas que se tomen a través de estas organizaciones «están abocadas al fracaso».
Europa Press