Por cuarto año consecutivo, la organización agraria gestiona centenares de contratos temporales ante la Subdelegación de Gobierno y los remite a los países de origen de los empleados que, tras completar las labores de la próxima vendimia, regresarán a sus casas.
Trabajadores sociales de AVA-ASAJA se desplazarán a Utiel-Requena con el fin de tramitar el alquiler de pisos para los temporeros y comprobar que el alojamiento cuenta con unas condiciones dignas de habitabilidad. Asimismo, los trabajadores extranjeros podrán recibir clases de castellano en la oficina de Requena de AVA-ASAJA los miércoles por la tarde para mejorar su adaptación.
Además de los cursos formativos de prevención de riesgos laborales que la organización agraria facilita a los temporeros, en este año AVA-ASAJA ha programado cursos que ofrecen a los empresarios viticultores la capacitación mínima exigida por la Autoridad Laboral para poder contratar trabajadores. Más de 350 viticultores se han inscrito en estos cursos organizados por la Confederación Empresarial Valenciana (CEV).
El presidente de AVA, Cristóbal Aguado, denunció que “los agricultores se tropiezan con demasiadas trabas burocráticas cuando intentan contratar inmigrantes de fuera de la UE”.
Aguado manifestó el “enorme esfuerzo que realizan los viticultores para hacerse cargo del coste económico del viaje de ida y vuelta, así como de la carga burocrática y del riesgo de incumplimiento en las cada vez más exigentes inspecciones en campo”.
AVA ha contactado además con Organizaciones No Gubernamentales y sindicatos en busca de un mayor número de trabajadores extranjeros que cubran el trabajo agrario tan solicitado en estas fechas.
Junta de Castilla-La Mancha