Remitido por Generalitat Valenciana
El Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias, dependiente de la conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación, está ultimando un método nuevo de detección precoz y diagnóstico de enfermedades graves que afectan al cultivo del olivo. Por su rapidez y fiabilidad, este nuevo método, denominado “PCR multiplex” es el que está recomendando el ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para toda España.
Este novedoso sistema supondrá, entre otras cosas, abaratar los costes de los análisis, sin perder sensibilidad. Además, su aplicación servirá para fomentar y, sobre todo garantizar la calidad sanitaria del material de multiplicación utilizado y producido por los viveros de olivo.
Con la puesta a punto de las técnicas de detección de enfermedades del olivo, la Conselleria da respuesta a una demanda de los oleicultores, que solicitaban plantaciones libres de tuberculosis y la verticilosis y de otras virosis comunes, que repercuten negativamente en el olivar, para evitar problemas futuros.
Para ello, el equipo del Departamento de Protección Vegetal y Biotecnología del IVIA viene trabajando desde 1998 en la puesta a punto de técnicas de detección de enfermedades del olivo. En este tiempo, los investigadores ha obtenido y ensayado satisfactoriamente en campo el sistema PCR multiplex, que hace posible de detección simultánea de la tuberculosis, la verticilosis, así como los virus más importantes del olivo en una única prueba. Se trata de una técnica potente y fiable que soluciona los inconvenientes existentes a la hora de realizar análisis de muestras.
Para facilitar la ejecución del análisis se ha diseñado un kit de diagnóstico serológico, en colaboración con una empresa privada que contiene todos los reactivos necesarios para efectuar la prueba. El usuario, según los investigadores, debe aportar solamente una muestra del olivo. El kit o estuche de diagnóstico permitirá popularizar el análisis de enfermedades del olivo y contribuirá de forma definitiva a garantizar la ausencia de enfermedades en el material vegetal multiplicado en los viveros.
Según las previsiones de los investigadores, en la próxima primavera se podrá comercializar el kit de diagnóstico que, simultáneamante, permite la detección de todas las enfermedades del olivo en una sola prueba, desde la bacteria causante de la tuberculosis del olivo, al hongo de la verticilosis, así como cualquier enfermedad contemplada en el reglamento de certificación español.
Este sistema ha sido ya convalidado en diferentes laboratorios y se estudia su inclusión como método oficial europeo en los protocolos internacionales de análisis de plantas de olivo.
La importancia del olivar
El olivo, originario de Asia Menor, se distribuyo por todos los países de la Cuenca del Mediterráneo y su cultivo se inició hace unos 6.000 años siendo en estos países donde se encuentra el 95% del patrimonio oleícola mundial. De ellos, España es el principal productor del mundo, con una superficie de 2,2 millones de hectáreas.
En la Comunidad Valenciana, la superficie destinada a este cultivo sobrepasa las 100.000 hectáreas y en algunas comarcas ocupa entre el 60% y el 80% de la superficie cultivada, considerándose monocultivo en términos municipales como Canet Lo Roig, Enguera, Concentaina, etc.
En el aspecto sanitario, el olivo puede verse afectado por un gran número de patógenos que, en ocasiones, causan graves enfermedades, como es el caso de la tuberculosis y de la verticilosis, que repercuten económicamente en la producción del olivar. El método más eficaz para el control de las enfermedades es la utilización de material vegetal libre de las mismas en el momento de realizar la plantación.
Hay que destacar que, actualmente, se ha implantado en España un programa de certificación de material vegetal de olivo que pretende la producción en vivero de plantas de garantía en las que se asegure la autenticidad varietal y se analice su estado sanitario respecto a los principales virus, bacterias y hongos que puedan afectar al olivo.
Por otra parte, complementariamente a la detección precoz, desde el IVIA se aconsejan medidas preventivas como utilizar variedades poco sensibles a la enfermedad, evitar las heridas durante el cultivo y la recolección, y reducir las poblaciones de la bacteria mediante tratamientos químicos en las épocas de máximo riesgo de infección, es decir primavera y otoño.
Generalitat Valenciana