El desarrollo de la campaña de limón 2005/2006 se ha visto dificultado de manera muy importante por la competencia en los mercados del limón turco y por la caída del consumo entre otras causas, lo que ha provocado una fuerte caída de las exportaciones y un hundimiento de los precios, tanto en árbol como de venta en los mercados, hasta unos niveles históricamente bajos. Se trata por tanto de una situación de crisis grave de mercado de limón que afecta a todos los eslabones de la cadena del sector: productores, operadores comerciales e industrias.
La coyuntura de esta campaña nos muestra un mercado europeo (comunitario y extracomunitario) inundado de oferta de limón a bajo precio, debido fundamentalmente a la fuerte competencia del limón procedente de Turquía, un país que en los 4 últimos años ha doblado prácticamente su producción y además goza de unos costes de mano de obra y de producción inferiores a los españoles. Así mismo los exportadores turcos se benefician de unas subvenciones encubiertas a la exportación que han sido denunciadas por AILIMPO a la Administración nacional y Comunitaria en numerosas ocasiones.
Por otra parte se constata un descenso del consumo de limón sobre todo en los países de la Unión Europea que se puede cifrar en torno al 10%, por lo que España a pesar de tener una producción normal esta campaña, en torno a 950.000 toneladas, ve importantes dificultades para comercializar nuestro limón.
En todo caso, todo apunta a que detrás de esta crisis de mercado hay un problema de carácter estructural en el sector de forma que se hace necesario abordar soluciones que sólo podrán ver la luz en un medio y largo plazo. No obstante, a corto plazo, y teniendo en cuenta que más del 70% del limón fino (más de 450.000 toneladas) está sin recolectar y que materialmente es imposible de dar salida en las 7-8 semanas de campaña que quedan, la interprofesional plantea como única opción tratar de recolectar la mayor parte de los limones Finos para ser destinados a su trasformación, de forma que el productor pueda percibir la ayuda comunitaria prevista (8,19 €/100 kilos) y recuperar al menos el coste de la recolección. Para ello los agricultores deberán firmar los contratos para industria antes del 28 de febrero. De esta forma se conseguiría al menos “limpiar” las fincas, de forma que no se comprometa la calidad de los limones para la siguiente campaña y evitando la aparición de problemas de plagas.
La situación se puede agravar aún más a partir del mes de abril cuando comience la campaña del limón VERNA cuya producción se estima en 350.000 toneladas (casi un 150% más que la campaña anterior), que debe competir con el limón de Argentina. Desde AILIMPO se reclama de las autoridades nacionales y comunitarias que se establezcan los controles necesarios que permitan garantizar el cumplimiento riguroso de la legislación comunitaria en materia de protección sanitaria frente a plagas de terceros países
AILIMPO