Se trata de un nuevo insecto ‘todoterreno’ para el control biológico de determinadas plagas de forma natural y respetuosa con el medio ambiente.
El método consiste en el desarrollo de la producción a gran escala de un nuevo enemigo natural propio del sureste español y de las regiones mediterráneas, lo que posibilita su aplicación en un amplio rango geográfico. Esta nueva especie se trata de una chinche depredadora, Nabis pseudoferus ibericus, de carácter polífago y con un apetito voraz.
Entre las ventajas, enumeradas por el catedrático de Entomología Aplicada Agrícola de la UAL, Tomás Cabello, destacan: su gran tamaño, entre 6 y 9 milímetros, que permitirá atacar a presas de tamaños muy superiores al suyo y para las cuales aún no existían enemigos naturales; su escasa capacidad de vuelo, que disminuye las pérdidas de individuos en cada suelta; y por último, su ciclo de vida, ya que supone un depredador muy activo tanto en la fase de ninfa como una vez desarrollado el individuo adulto.
Entre las plagas sobre las cuales su eficacia ha sido probada, se encuentran: ‘rosquilla verde’ (Spodoptera exigua), rosquilla negra (Spodoptera littoralis), mosca blanca (Benmisia tabaci) y diferentes especies de áfidos y pulgones, como por ejemplo Aphis gossypii y Aphis fabae.
Actualmente se ha detectado en determinadas zonas de España una nueva plaga, especialmente dañina, causada por la polilla del tomate, Tutta absoluta, para la que se ha probado la eficacia de Nabicontrol, así como en la lucha biológica contra la oruga Spodoptera exigua que causa importantes pérdidas en el cultivo de pimiento.
Junta de Andalucía