Greenpeace, que llevará el caso a los tribunales de la Unión Europea, pide que se haga efectiva la demolición del edificio.
A la vista del recurso interpuesto por la organización conservacionista Salvemos Mojácar, las obras del hotel que la empresa Azata del Sol construye en la playa del Algarrobico, en el Parque Natural de Cabo de Gata, han sido paralizadas por orden del titular del Juzgado número 2 de lo Contencioso-Administrativo de Almería, Jesús Rivera.
Un grupo de activistas de Greenpeace denunció el pasado mes de noviembre la construcción ilegal del hotel, por lo que el Ministerio de Medio Ambiente ordenó una semana después la paralización inmediata de las obras de la parte del hotel que estaba sobre la zona de servidumbre de la playa del Algarrobico. No obstante, la empresa que construye el complejo consideró que el anuncio de expropiación de parte de los terrenos ”no pasa de una mera declaración de intenciones”, así es que siguió adelante con el proyecto.
Ante la pasividad de la Junta de Andalucía, que según Medio Ambiente es quien debe ordenar la paralización de las obras, Greenpeace decidió hacer un derribo simbólico de una pequeña parte del hotel y llevar los escombros ante la sede de la Presidencia del Gobierno de la Junta. A continuación anunció que llevaría ante los tribunales de la Unión Europea este asunto.
Greenpeace pretende con esta iniciativa que ”se haga efectiva la demolición del macrohotel ilegal del Algarrobico de 411 habitaciones y más de 20 plantas en terrenos protegidos del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar”, según aseguró la propia organización ecologista
SILVANUS