Merino califica de “bochornosa” esta actitud mostrada por el MAPA, ya que la desaparición de estas ayudas supone un paso atrás en la consecución de la igualdad que vienen reivindicando las mujeres del campo español, máxime cuando su presencia en el sector es garantía del relevo generacional.
La Comisión Europea aprobó recientemente el Marco Nacional de Desarrollo Rural en España. Para poder aprobar dicho documento, la Comisión exigió al Mapa que eliminara las ayudas que hasta ahora se vienen otorgando a las mujeres que se incorporan al sector agrario, basándose en el artículo 8 del Reglamento de Desarrollo Rural 1698/2005.
AMFAR entiende que la supresión de estas ayudas se debe, en gran medida, a una mala justificación de las mismas por parte del Ministerio, donde ha primado más la aprobación a última hora del Marco Nacional de Desarrollo Rural en España, que las consecuencias que ésto haya acarreado, entre otras, la supresión de las ayudas por ser mujer el beneficiario con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2007.
Otro problema derivado de esta interpretación podría ser la pérdida de otras acciones positivas, recogidas en la reciente Ley de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, que provienen también de fondos FEADER.
La presidenta AMFAR, Lola Merino, ha solicitado una reunión con la titular del Ministerio, Elena Espinosa, para exigirle la defensa de estas ayudas “que constituyen una garantía para favorecer la igualdad entre hombres y mujeres en el sector agrario”.
Merino sostiene que deben existir las acciones positivas a favor de la mujer para conseguir la igualdad. No en vano, con la mala justificación del Ministerio ante la Comisión Europea, se podrían desvanecer todas las políticas especiales de apoyo a las mujeres, así como a otros colectivos desfavorecidos, y por supuesto, desaparecer la transversalidad.
AMFAR