La consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía ha ampliado el programa de ayudas
agroambientales, incorporando apoyos para actuaciones en apicultura ecológica y en
sistemas de dehesas, según la orden que publica hoy el BOJA. El objetivo de estas
ayudas, incluidas en las medidas de acompañamiento del Plan de Desarrollo Rural,
cofinanciado por la UE, es fomentar el uso de métodos de producción agraria y
ganadera compatibles con el medio ambiente.
Con estas dos nuevas líneas, ya son doce el conjunto de medidas que pueden
beneficiarse de estas ayudas, entre las que se incluyen, además de las anteriores,
proyectos destinados a evitar la erosión del olivar y conservación de razas autóctonas en
peligro de extinción. Fomentar la agricultura y ganadería ecológicas, la producción
integrada de arroz, mejorar las explotaciones de campiña, como el girasol, e impulsar la
apicultura para mejorar la biodiversidad en zonas frágiles, completan estas medidas.
Con carácter general, uno de los requisitos para beneficiarse de estas subvenciones
agroambientales es comprometerse, durante cinco años, a invertir el dinero de la ayuda
en el empleo de métodos de mínimo impacto medioambiental. Asimismo, los
beneficiarios tienen que cumplir el Código de Buenas Prácticas Agrarias, un documento
base que apuesta por la agricultura sostenible.
En concreto, para acceder a las ayudas a la apicultura ecológica, entre otras condiciones,
los titulares deben tener más de 50 colmenas inscritas en el Registro Oficial de
Explotaciones Apícolas y, como mínimo, una hectárea de cultivo ecológico por cada
colmena. Según la nueva normativa, que entrará en vigor próximamente, estas
subvenciones son incompatibles con las de mejora de la biodiversidad en zonas frágiles.
En cuanto a las medidas de apoyo a actuaciones en sistemas adehesados, se establecen
cuatro tipos de ayudas para la regeneración del arbolado de los géneros Quercus
(especialmente alcornoque, encina y quejigo) y Olea (exclusivamente acebuche), así
como la transformación de cultivos herbáceos en praderas permanentes de secano, en
cultivos forrajeros para aprovechamiento a diente por el ganado, y en praderas
espontáneas de secano. Para acceder estas ayudas, entre otros requisitos, los solicitantes
deben contar con una superficie mínima de pastos declarada en la PAC (Política Agraria
Común) de 20 hectáreas
Priorización de las ayudas
Asimismo, la normativa regula una serie de criterios de priorización, que se aplicarán en
el supuesto de que el número de solicitudes supere la dotación presupuestaria asignada a
Andalucía. Con carácter general, se tendrán en cuenta las explotaciones ubicadas en
zonas desfavorecidas, a efectos de la medida de Indemnización Compensatoria, y las
incluidas en zonas con limitaciones medioambientales específicas, como las de
distribución del lince ibérico (Lynx pardinus) de Doñana, Sierra Morena y determinadas
dehesas, así como que mayor porcentaje de renta proceda de la actividad agraria. Con
carácter específico y para la medida de apicultura ecológica, se valorará especialmente
la condición de apicultor profesional.
En la presente normativa, también se modifica la Unidad Mínima de Cultivo
Agroambiental (UMCA) –superficie de referencia para determinar la cuantía de la
ayuda-, con unos mínimos que oscilan entre 25 has/umcas para las actuaciones
agroambientales respecto a la rotación de cultivos (girasol de secano en rotación) a 300
has/umcas para la apicultura destinada a la mejora de la biodiversidad en zonas frágiles.
A través del Programa de Ayudas Agroambientales 2000-2006, incluido en las medidas
de acompañamiento del Plan de Desarrollo Rural, unos 16.000 agricultores y ganaderos
andaluces, con una superficie de 350.000 hectáreas, se están beneficiando de estas
ayudas. Este número podrá ampliarse con la incorporación de las dos nuevas líneas de
apoyo.
Junta Andalucía