Remitido por la Junta de Andalucía:
El consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña, animó a los agricultores a acercarse a las nuevas tecnologías y a convertirlas en técnicas cotidianas dentro del mundo rural, ya que desarrollar y aplicar la tecnología «ofrece grandes ventajas en la producción, transformación y comercialización».
Durante la inauguración en Sevilla de las II Jornadas de Innovación y Nuevas Tecnologías en el Mundo Rural, organizadas por Asaja-Sevilla, el consejero subrayó que uno de los objetivos de su Departamento es precisamente aproximar los últimos avances al sector y formar a sus usuarios, de manera que puedan agilizar sus trámites en la solicitud de ayudas, tengan constancia inmediata de su gestión y conozcan las actuaciones puestas en marcha por la Consejería de Agricultura de las que pueden verse beneficiados.
Entre todas las herramientas creadas por la Junta de Andalucía y destinadas al sector agrario, Pérez Saldaña destacó la tarjeta del olivicultor, la del algodonero o el envío de SMS a móviles con los pagos efectuados. No obstante, entre todas ellas subrayó la que se ha convertido en un ejemplo a seguir por otras Comunidades Autónomas, el Sistema de Información Geográfica de Identificación de Parcelas Agrícolas (SIGPAC), un instrumento que servirá para la gestión y control de las ayudas agrarias a partir del 1 de enero de 2005.
Según comentó el consejero, el SIGPAC ha supuesto un «gran esfuerzo logístico y presupuestario» de la Junta de Andalucía, en colaboración con el Ministerio del Agricultura, Pesca y Alimentación, para llevar a la realidad un instrumento del que ya se han hecho eco otras Comunidades Autónomas.
Además, gracias a esta herramienta, Andalucía también se ha convertido en la primera del territorio nacional en poner a disposición del sector una web y un conjunto de discos duros con toda la información para los agricultores puedan consultarla y efectuar las correcciones oportunas.
En opinión de Pérez Saldaña, las nuevas tecnologías «deben y van a estar presentes en nuestra actividad de futuro» desde la ganadería, pasando por la agricultura, hasta la propia gestión de la administración. Así, puso como ejemplo la identificación de animales con bolos electrónicos para contribuir a la seguridad alimentaria, la informatización de los datos de las diferentes campañas o la teledetección de parcelas regadas o no.
Del mismo modo, el consejero vaticinó que las nuevas aplicaciones tecnológicas contribuirán a desarrollar una gestión administrativa «más efectiva y ágil», lo que incidirá en la política de proximidad con el sector, sin menosprecio de «la relación directa con nuestras Delegaciones y Oficinas Comarcales más cercanas».
Junta de Andalucía