Esta medida resulta tremendamente injusta, más aún cuando estos regantes tienen instalados contadores y han planificado sus siembras en función de la dotación de 2.500 m3/ha autorizados por la propia Confederación para el riego de cultivos permanentes y la finalización del algodón, una dotación que no ha sido consumida ni de lejos por estos regantes, que ahora no podrán continuar regando.
De este modo, la CHG se contradice de forma flagrante en sus propias decisiones, cuando ha obligado a todos los agricultores a instalar contadores para controlar el consumo de agua de los mismos -decisión apoyada por Asaja pero que ha supuesto una importante inversión-, y ahora prohíbe el riego y sanciona al que ha tomado las medidas de ahorro estipuladas por la propia CHG, utilizando medios de antaño. En los últimos años ha funcionado correctamente el sistema de contadores y no hay explicación alguna para perjudicar al que no ha utilizado la dotación que le corresponde y necesita regar durante unos días más por las necesidades agronómicas del cultivo.
Los agricultores han planificado sus siembras en función de sus posibilidades de riego, marcadas por la dotación asignada y por el control de los contadores. Imponer sanciones al que hace las cosas bien hará imposible dar los riegos necesarios a los cultivos y perjudicará notablemente la economía de estos regantes que no han consumido la totalidad del agua concedida por la propia CHG.
Por tanto, ASAJA-Andalucía exige que la CHG rectifique y permita a todos los regantes que ya tienen instalados sus contadores volumétricos, incluso a los que no están en Comunidades de Regantes, regar los días que consideren oportunos, siempre y cuando no rebasen el volumen de dotación asignado.
Asaja-Andalucía