Nota de Asaja CLM
Este incremento de la producción se extiende en todo el territorio castellano-manchego aunque los porcentajes varían de una provincia a otra. En Ciudad Real se espera un incremento de más del 70 por ciento respecto al año anterior al pasar de 20.772 toneladas a 36.000 toneladas en la campaña 03-04. La provincia de Guadalajara casi duplica su producción pasando de 2.300 a 3.500 toneladas. En Toledo y Cuenca la producción de aceite de oliva se incrementa un 38 y un 33 por ciento, respectivamente, al pasar de 23.205 toneladas a 32.000 toneladas, en Toledo, y de 5.259 a 7.000 toneladas, en Cuenca. Por último, Albacete producirá en torno a las 8.000 toneladas lo que supone un 20 por ciento más que el año anterior en el que se obtuvo 6.676 toneladas.
Según ASAJA, las altas temperaturas registradas en los meses estivales, así como, las lluvias de los meses de octubre a diciembre no han influido como se temía en la producción de aceite de oliva, lo que unido a la falta de heladas han contribuido a tener una cosecha buena tanto en cantidad como en calidad, destacando la ausencia de enfermedades de la aceituna.
En cuanto a los precios, esta Organización Agraria ha señalado que si se mantiene en 2,15 –2,20 euros por kilogramos el precio para el aceite de oliva virgen extra debería fijarse por encima de 0,40 euros por kilogramo el precio de la aceituna para molturación.
Por otra parte, ASAJA de Castilla-La Mancha ha exigido a la Consejería de Agricultura que abone lo antes posible la totalidad de las ayudas a la producción correspondientes al año pasado. Según esta Organización Agraria, queda pendiente de abonar a los oleicultores un total de 18 millones de euros ya que en la segunda quincena de diciembre la Administración regional efectuó dos pagos, uno de 516.000 euros y otro de 42 millones de euros.
ASAJA de Castilla-La Mancha ha reiterado la necesidad de que la Administración regional pague en tiempo y forma las ayudas a los oleicultores, con objeto de que puedan disponer de liquidez suficiente para afrontar los gastos que conlleva la actividad agraria.
Por último, la Organización ha recordado la importancia de que salga adelante una reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del aceite de oliva que reconozca la realidad del cultivo en la región.
Por esa razón, ha exigido que se defienda con firmeza su propuesta que plantea una ayuda basada, una parte, en los rendimientos y, otra, en criterios sociales y medioambientales.
De esta manera un 60 por ciento de la ayuda se recibiría en función de la producción media obtenida en el periodo de referencia 2000-2002 y el 40 por ciento restante se distribuiría de forma lineal por hectárea, según tres categorías.
El aceite de oliva es una de las principales producciones agrarias de Castilla-La Mancha, ya que registra unas 319.000 hectáreas donde se contabilizan cerca de 27.500.000 olivos con una producción media superior a las 50.000 toneladas, lo que la sitúa como la segunda región productora de España, después de Andalucía.
En Castilla-La Mancha hay unos 98.000 titulares del registro oleícola, de los cuales más de la mitad dependen, en mayor medida, del cultivo del olivar que, en la región, requiere más de dos millones y medio de jornales al año.
En la región existen un total de 241 almazaras cuyo volumen de negocio se calcula en unos 120 millones de euros.
La calidad del aceite de oliva de Castilla-La Mancha es excelente. Las diferentes variedades, entre las que destaca la cornicabra con más del 80 por ciento de la superficie, han proporcionado unas características organolépticas a nuestros aceites de calidad y riqueza contrastadas. Asimismo, hay que destacar la apuesta decidida por nuestros oleicultores hacia la producción de aceite de oliva ecológico, alcanzando en la actualidad las 6.810 hectáreas.
Asaja CLM