La utilización por parte de las grandes cadenas de distribución de excedentes a bajo precio de Francia, Portugal y Alemania, para sus marcas blancas, ha desplazado de los lineales a las principales marcas de leche españolas, que tienen serias dificultades para vender su producción y como consecuencia para recoger la leche a nuestros ganaderos, aunque el precio esté prácticamente por los suelos. Esta situación se ha agudizado en las últimas semanas y en las próximas puede adquirir tintes dramáticos ante la decisión de varias industrias lácteas de no recoger su materia prima a unos 2.000 ganaderos gallegos y de las diferentes regiones productoras.
En estos momentos el 75% de las explotaciones lácteas están vendiendo su leche por debajo de los costes de producción y entre 4.000 y 5.000 explotaciones se encuentran en el umbral de rentabilidad y en grave riesgo de quiebra. Ante esta crítica situación, ASAJA, COAG y UPA exigirán el MARM un paquete de medidas para conseguir la garantía de recogida de toda la leche española y el equilibrio en el mercado, precios rentables al ganadero y estabilidad en el sector.
España es un país que por el sistema de cuotas de producción, apenas produce el 70% de las necesidades de consumo. Sin embargo, el sector de la distribución utiliza el “dumping comercial” para distorsionar el mercado, llevando a la ruina al sector lácteo español.
En la última década, el sector lácteo ha sufrido un brutal proceso de reconversión en nuestro país. Las cifras son más que ilustrativas; en 1992 había 141.000 explotaciones, hoy sólo quedan 26.200. Muchos ganaderos no han podido soportar unos precios a la baja durante años, que en ocasiones no cubrían ni los costes de producción, y se han visto obligados a abandonar.
ASAJA