La crisis por la que atraviesa el sector agrario está motivada por la convergencia de varios factores, entre los que destaca la presión que ejercen sobre los profesionales del campo tanto la cadena de distribución, como las grandes superficies e intermediarios cuyo objetivo es comprar las producciones agrarias a precios que, en muchas ocasiones, están por debajo de los costes de producción. A esta situación hay que añadirle el encarecimiento de los medios de producción, es decir, maquinaria, fertilizantes, combustible, semillas o productos fitosanitarios, entre otros.
Para combatir esta situación, ASAJA de Cuenca considera imprescindible la aplicación inmediata de una serie de medidas que aseguren la rentabilidad de las explotaciones de agricultores y ganaderos.
En primer lugar, es urgente un cambio en el sistema de comercialización que reduzca intermediarios que se lucran a costa de las producciones agrarias. Además, es necesaria una modificación de la Ley de Interprofesionales para que las operaciones de compra y venta se definan bajo contratos-tipo y de esta forma los productos agrícolas estén protegidos.
ASAJA de Cuenca insiste en la necesidad de una Ley de Márgenes Comerciales cuya aplicación asegure a los profesionales del sector agrario la venta de sus producciones por encima de los costes de producción. Actualmente, alimentos como la cebolla mantienen un diferencial origen-destino de casi un 950 por ciento. En el caso de la patata y el ajo el precio se multiplica casi por cinco desde lo que percibe el agricultor hasta lo que paga el consumidor. Por el melón de piel de sapo los agricultores están percibiendo cerca de 12 céntimos de euro por kilogramo cuando se llega a vender en el mercado a más de euro y medio.
Por ello, la Organización también considera necesario un doble etiquetado en el que quede constancia de estos diferenciales en origen y en destino, ya que los abusos en la cadena de comercialización de los alimentos también repercuten en los elevados precios que los consumidores pagan por ellos.
ASAJA de Cuenca también exigirá ante la Subdelegación del Gobierno la protección en frontera para las importaciones de forma que se garantice una competencia justa en el mercado, planes de promoción para las producciones agrarias y la implantación de un código de Buenas Prácticas Comerciales.
ASAJA Cuenca