Nota de ASAJA Salamanca
En ASAJA SALAMANCA hemos constatado un creciente malestar entre los ganaderos de vacuno de las zonas de Ciudad Rodrigo, la Fuente de San Esteban y Ledesma ante la escasez de los Documentos de Identificación Bovina. Asimismo, otro de los inconvenientes añadidos es la tardanza para restituir los crotales perdidos o deteriorados cuando los ganaderos se dirigen a las unidades veterinarias correspondientes, un período de espera que puede prolongarse incluso más de un mes frente al margen de diez días en el que anteriormente recibía el ganadero las nuevas marcas auriculares.
El problema mencionado se debe, fundamentalmente, al mal funcionamiento del Simocyl y al procesamiento inadecuado de las altas y bajas que se registran en esta base de datos dependiente de la Dirección General de Producción Agropecuaria. El proceso de ralentización señalado, según Santos Cordero, el Jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería, se verá solucionado a finales de abril o principios de mayo, fecha que esta OPA considera excesivamente tardía para asuntos que requieren una identificación inmediata como es el caso de los ceses anticipados.
Desde ASAJA SALAMANCA subrayamos que trabas de este tipo pueden generar un grave perjuicio en los ceses y cambios de titularidad ya que los nuevos propietarios de la explotación podrían perder las ayudas correspondientes si no justifican convenientemente las cabezas de ganado en el plazo convenido. Una solución que de ninguna manera puede solucionarse con 50.000 impresos de los 400.000 solicitados por las unidades veterinarias para la provincia de Salamanca, una de las regiones con mayor movimiento administrativo en cabaña ganadera.
Concluyendo, ASAJA SALAMANCA quiere mostrar su malestar al respecto y espera que estos «DNI bovinos» se agilicen a la mayor brevedad posible para evitar males mayores y la pérdida de subvenciones.
ASAJA Salamanca