Los ganaderos de ovino y caprino se sienten engañados después de la ficticia puesta en marcha, desde el pasado 9 de julio de 2005, del sistema de identificación electrónica para estas especies. ASAJA SALAMANCA denuncia el hecho de que esta norma, actualmente, carece de base y es el propio productor, ante la pasividad de la Administración, el único que realmente se interesa sobre el método de identificación electrónica a aplicar en los animales que, desde entonces, han nacido en su explotación.
Esta organización agraria critica la falta de previsión del Ministerio a la hora de dotar de los suficientes medios técnicos y materiales a una norma, ahora voluntaria, que empezará a ser obligatoria para toda la cabaña de ovino y caprino del país en el 2008 cuando ni siquiera se están facilitando las subvenciones comprometidas (MAPA 50%, Junta 30%, ganadero 20%) para su puesta en funcionamiento en las explotaciones.
Asimismo, el MAPA también ha ignorado astutamente la idoneidad de otros métodos más fiables y económicos como el microchip frente a la ineficacia del bolo ruminal, una segunda identificación más afín y cercana al círculo de amistades comerciales del Ministerio.
ASAJA SALAMANCA insta, por tanto, a la Administración central a que recapacite y escuche, por una vez, la opinión del profesional del campo y, por ende, el pronunciamiento de Bruselas el próximo mes de febrero sobre el microchip como segunda identificación electrónica más adecuada para las especies ovina y caprina.
Esta organización exige además la publicación inmediata de una línea de subvenciones que incluya la financiación tanto de los materiales como el de la instalación de los elementos necesarios para llevarlo a la práctica en la explotación (equipo informático, alfombrilla electrónica para la lectura masiva o conexión directa a la base de datos que el MAPA creará para estos fines). Sólo reconsiderando estos aspectos claves de una norma que aún hoy no se está aplicando, los ganaderos de ovino y caprino podrán asumir el desorbitado gasto que se les avecina con la aplicación de la doble identificación electrónica.
ASAJA Salamanca