ASAJA estima la cosecha de cereales en 17,5 millones de toneladas

La sectorial de cereales de ASAJA se reunió la pasada semana en Madrid para analizar los datos relativos a la actual campaña y estima la producción de cereales de otoño-invierno en 14,5 millones de toneladas, de las cuales 3,8 millones serán de trigo blando; 1,9 de trigo duro; 8 de cebada y 0,8 de otros cereales. A esta cantidad habrá que sumar 3 millones de toneladas más, correspondientes al maíz, lo que da como resultado un total de 17,5 millones de toneladas para el conjunto de los cereales españoles.

La cosecha de cereales de otoño-invierno, que hace unos meses se preveía abundante, se ha visto truncada por la desfavorable evolución del tiempo de los meses de mayo y junio, con exceso de calor y falta de precipitaciones. Solamente las zonas más tempranas están teniendo buenas producciones, ya que a medida que las zonas son mas tardías aumenta el deterioro de los rendimientos, como consecuencia de verse más afectadas por este clima desfavorable. Por otro lado, la superficie de maíz se ha visto muy reducida por la falta de agua y el coste de la energía.

En definitiva la cosecha de esta campaña será bastante mediocre con una producción algo por encima de la mitad del consumo, estimado en 29 millones de toneladas, aunque sin llegar a la gran debacle del año pasado.

Con estas condiciones, ASAJA estima que el mercado se debería estabilizar en precios razonablemente superiores a los que ahora están cotizando, por lo que recomienda que se almacene la producción al menos hasta que se estabilice el mercado, ahora claramente distorsionado por las ventas que se realizan de forma inmediata. ASAJA desaconseja en todo caso hacer ventas con “precio abierto” en las que no existe ninguna garantía sobre el precio final.

En este sentido, ASAJA recuerda que este año es previsible una mayor demanda para la exportación de trigo duro de calidad, que se está dando en gran medida en esta campaña; además, también es previsible una cierta firmeza en los precios del maíz debido, por un lado, a las menores producciones que se van a registrar tanto en España como en Francia y, por otro, al alza de los precios internacionales.

Por todo ello, la situación actual no justifica que haya un hundimiento de precios a principio de la campaña, y esta situación solo responde a la necesidad de vender inmediata que puedan tener algunos agricultores y a la capacidad de los comerciantes de aprovecharse de esta coyuntura

ASAJA

Deja una respuesta