De esta manera, las eléctricas han ejercido, durante los últimos meses, un juego de presión mediante la contratación telefónica de voz, obligando a los titulares de las líneas a optar por tarifas más costosas con compromisos de permanencia que les atan de pies y manos.
ASAJA Salamanca denuncia que, efectivamente, no se están aplicando las ofertas de riegos en aquellas explotaciones que no tenían contratada alguna de las antiguas “R”. Por lo que, desde esta organización agraria, se aconseja que, aquellos que tengan Alta Tensión, los de R. 1, opten por otra línea mientras que los posicionados en la tarifa 1.1 se mantengan en la misma situación, al menos, hasta diciembre. En este sentido, desde ASAJA se está reivindicando que la oferta de la tarifa 1.1 sea igual o similar, en cuanto a condiciones, a la R.1. En cualquier caso, la mejor opción es aceptar los modelos de contrato establecidos pero cambiando la potencia en cada uno de los períodos para así conseguir un ahorro tanto en los meses en los que no se riega como en los que sí.
Resulta lamentable comprobar cómo el Ministerio de Industria y el Ministerio de Medio Ambiente han hecho, estos últimos tres meses, la vista gorda ante el monopolio y abuso de poder de las eléctricas sin obligar a respetar el acuerdo con los agricultores en pos de unas condiciones adaptadas al sector agrícola.
Por último, ASAJA exige al Gobierno el cumplimiento del acuerdo sobre “el contrato de temporada” con el fin de que los agricultores puedan adaptar su riego en función del cultivo y la zona. Asimismo, esta organización agraria exige agilidad en la publicación de la ampliación de las horas valle que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo se comprometió a aplicar a fines de semana y festivos.
ASAJA Salamanca