Remitido por ASAJA
España ha sido pionera en la siembras de maíces transgénicos y con la experiencia recogida desde hace 7 campañas en nuestro país, la UE ha ido ordenando la normativa precisa para extender la posibilidad de la producción y el consumo a todos los países. Así en este año 2004 hemos asistido a la regulación del etiquetado y la trazabilidad (abril ‘04), fin moratoria (mayo ‘04), incorporación de 17 variedades al Catálogo Europeo de Semillas (septiembre ‘04), trazabilidad (enero ‘05)…
En estos momentos, a través de la Comisión Nacional de Biovigilancia se está redactando el Real Decreto para regular la Coexistencia del maíz tradicional con el maíz transgénico. Casos como la supuesta “contaminación” acontecida en Sariñena y que ha sido presentada con la puesta en escena acostumbrada, debe ser mera anécdota si se siguen con rigor y profesionalidad las medidas de coexistencia al efecto. Para ello es necesario una amplia campaña informativa de la Coexistencia dirigida a los agricultores para dar un tratamiento normal a lo que es normal. Es decir, ASAJA defiende que cada uno siembre según su elección y los agricultores conozcan un protocolo de trabajo que respete y garantice su cosecha de las de las parcelas próximas.
Lo que es difícil admitir, es que apenas 30 Has. de maíz ecológico censadas en España -datos del 2002- condicionen la actividad de todo un sector maicero nacional de enorme interés estratégico para agricultores, ganaderos, industrias, etc…, en un país como el nuestro, deficitario en cereales en más de 3,3 millones de Tm. Los agricultores no vamos a tirar piedras contra nuestro propio tejado, los cultivos transgénicos son producciones enteramente normales a la hora de la producción, comercialización y consumo. Es preciso diferenciar mercados como ocurre con los productos tradicionales y ecológicos y de esta forma proponer al consumidor varias opciones a su elección.
Algunos grupos ecologistas entienden la situación y se decantan por la normalización de todas las actividades garantizando que lleguen a buen puerto. Otros han radicalizado sus mensajes y pretenden hacer imposible otra actividad que no sea la suya, y para ello utilizan todo tipo de puestas en escena y razonamientos incendiarios plagados de demagogia y sin sentido, a sabiendas de que calan en la sociedad y que tienen un eco mediático asegurado.
Los agricultores que trabajamos para ganarnos la vida con nuestra actividad lo que hacemos es hacer las cosas con sensatez garantizando la seguridad alimentaria al consumidor, como es el caso de los trangénicos, que están avalados por toda la normativa europea y nacional, las más de 60 millones de Has. que se hacen en todo el mundo y unos planes de seguimiento rigurosísimos por parte de las autoridades que se ven respaldadas, sin fisuras, por todo el mundo científico internacional serio.
Desde ASAJA instamos a la administración a fijar con toda claridad las reglas del juego y a promocionar y difundir el uso normalizado de las cosechas transgénicas en el sector agrario, que tantas ventajas aportan a productores y consumidores, con el añadido de los valores medioambientales que conllevan.
ASAJA