AVA-ASAJA valora positivamente algunos de los cambios introducidos sobre la ‘apocalíptica’ propuesta realizada en noviembre por la Comisión de Medio Ambiente del PE pero advierte que el alcance del acuerdo dependerá de su redacción y previsiblemente su desarrollo dejará un amplio margen de interpretación tanto a los Estados miembros como a Bruselas. “En cuanto se apruebe la propuesta habrá que estar muy atentos a la fase de redacción tanto de la directiva como del reglamento porque de la letra pequeña dependerá buena parte del impacto negativo que, pese a todo, seguro se dará sobre la producción mediterránea”, matiza el presidente de esta organización, Cristóbal Aguado, quien postula además la conveniencia de crear una mesa nacional donde se dé cabida a las autonomías y a los productores para coordinar la aplicación de la norma en nuestro país.
AVA-ASAJA lamenta que las instituciones europeas hayan terminado de perfilar el nuevo marco legal sin antes haber realizado un estudio sobre el impacto que éste supondrá tanto en la disponibilidad de materias activas como en la producción agrícola y sanidad vegetal. De igual manera, la organización discrepa sobre la visión triunfalista que avanzó el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural la semana pasada, que señaló que el pacto alcanzado había logrado reducir la futura eliminación del 80% de las materias activas hoy usadas en la agricultura mediterránea a sólo el 10%. A este respecto, la organización advierte que sólo la definición del criterio de exclusión referido a las materias que tengan efectos como disruptor endocrino –que se ha quedado sin concretar- podría elevar mucho este porcentaje. Por este motivo, AVA-ASAJA recomienda al Ejecutivo español que medie ante los europarlamentarios para que se vote de forma separada el texto referido a éste y al resto de criterios de corte planteados.
En este sentido, cabe destacar que los fitosanitarios que en el futuro quedarán prohibidos dependerá del riesgo real que se estime para cada uno de esos criterios para lo cual se impone que tales análisis los realicen expertos científicos independientes.
AVA-ASAJA valora como muy positivo el paso dado para la armonización de normativas con la creación de tres zonas dentro de la UE en la que el reconocimiento de una sustancia activa por parte de un Estado miembro suponga la asunción de la misma por parte del resto. Sin embargo se ha establecido una discrecionalidad, basada en circunstancias medioambientales o agrícolas, que amenaza con convertirse en un nuevo factor de distorsión. En idéntico sentido la organización reconoce avances en cuanto a la excepcionalidad permitida para mantener durante 5 años un producto amenazado de eliminación cuando éste no tenga alternativa y suponga una amenaza contra la salud vegetal. Junto a ello, se ha permitido justificar, por motivos excepcionales, posibles fumigaciones aéreas.
La organización agraria valenciana se ha significado por su protagonismo en la discusión de esta normativa, que ha sido y es duramente criticada. Durante estos meses, miembros de AVA-ASAJA han aportado informes y mantenido encuentros con destacados miembros de todas las instituciones europeas involucradas y ha participado en seminarios, congresos y grupos de trabajo convocados a este respecto.
AVA-ASAJA