Las variedades más afectadas, con daños que en algunos casos superan el 50% de la cosecha pendiente, son Valencia Late, Navel-late y Ortanique. Además, la fuerza del pedrisco ha provocado incluso defoliación de los árboles y caída de frutos al suelo.
Los municipios de la comarca de La Safor que sufrieron con mayor intensidad la tormenta de piedra fueron Xeraco, Xeresa, Gandía, Daimús, Alquería de la Comtesa, Oliva, Font d’En Carrós, Simat de la Valldigna, Guardamar, Miramar, Palmera y Almoines. Así mismo, el granizo causó daños puntuales en los invernaderos de la zona, tanto por rotura por los impactos, como por caída por el peso del agua y el granizo acumulados.
Por otra parte, la tormenta de pedrisco también dejó sus efectos sobre una docena de pueblos de la comarca de L’Horta Nord, afectando a los cítricos, alcachofas e invernaderos de la zona. Sin embargo, AVA considera que al ir acompañada de abundante agua, los daños, previsiblemente, serán menores, aunque, puntualmente se registró algún campo donde la intensidad fue tal que causó incluso defoliación en cítricos.
Los municipios más afectados fueron Foios, Albalat dels Sorells, Albuixech, Meliana, Vinalesa, Museros, Moncada, Alfara del Patriarca, Massalfassar, Massamagrell, Pobla de Farnals y El Puig.
No obstante, AVA manifiesta que los daños podrían verse incrementados conforme pase el tiempo, “y más si sigue lloviendo, pues la fruta que haya sufrido el impacto del granizo podría verse además afectada por enfermedades de hongos debido a la alta humedad”.
Ava-Asaja