La Asociación Valenciana de Agricultores
(AVA-ASAJA) critica la actuación de los ayuntamientos que están girando
el recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza rústica a
los agricultores que sufrieron pérdidas en sus cosechas por sequía y las
lluvias torrenciales de octubre y que en virtud del Real Decreto 7/2001
se encontraban exentos del pago este año.
AVA ya solicitó a todos los consistorios afectados por estas
adversidades climáticas que no remitieran dicho impuesto a los
agricultores. Sin embargo, muchos ayuntamientos han hecho ³oídos sordos
a esta exención, en lo que supone una actitud bastante cicatera, hecho
que supondrá un sobrecoste para la propia Administración, así como un
grave perjuicio de papeleo innecesario para los agricultores², advierte
el presidente de AVA, Cristóbal Aguado.
Los agricultores que hayan recibido el giro del IBI rústico y no lo
hayan pagado todavía, deberán presentar un escrito de exención a su
ayuntamiento, y para los que hayan efectuado el pago, deberán presentar
un escrito de devolución de ingresos indebidos. AVA tramitará, a través
de sus delegaciones locales, tanto los escritos de exención como de
devolución a todos los agricultores afectados por este cobro ilegal.
³Las buenas palabras y solidaridad de la Administración ante desastres
climáticos que afectan gravemente a la economía de los agricultores
parecen quedar en el olvido en la práctica, hecho que, por otra parte,
se está convirtiendo en algo habitual, no sólo en su aplicación sino
también en la propia redacción de las órdenes sobre fiscalidad que sólo
crean desconocimiento y perjuicio, como ocurrió recientemente con la
rebaja de módulos que dejó fuera a pueblos afectados por las lluvias de
octubre y que todavía no ha sido corregida², critica Aguado
AVA