Como consecuencia de este compromiso europeo con los biocombustibles, ha aumentado la demanda de los cultivos energéticos por parte de plantas de bioetanol y biodiésel. En los seis primeros meses de 2007 se estima un incremento de los precios en origen de la cebada, trigo, girasol y colza hasta del 30% respecto el año pasado.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, valoró el efecto positivo de la apuesta comunitaria por el uso de los biocarburantes porque “resulta una alternativa real y rentable para los productores españoles y valencianos ante la dramática crisis de precios que atravesamos”.
Aguado denunció que “este encarecimiento de las materias primas perjudica seriamente la rentabilidad de las explotaciones ganaderas”, pero advirtió al mismo tiempo que “las plantas de bioetanol y biodiésel generan subproductos que pueden destinarse a las granjas como alimentación de ganado”.
“Fomentar normativas que evitan el abandono rural es muy importante”, indicó Aguado, “puesto que la actividad agraria contribuye a frenar graves problemas medio ambientales como la erosión del suelo y la propagación de incendios forestales”.
AVA-ASAJA