La asociación agraria reclamaría con esta querella indemnizaciones directas a los productores de tomate porque considera responsable de la rápida expansión de esta plaga al departamento de Elena Espinosa, tanto por los fallos en los controles aduaneros –que no advirtieron la entrada de esta agresiva polilla hasta ahora radicada en Sudamérica- como por la inacción demostrada durante los casi siete meses que han transcurrido desde que se localizó en Valencia el primer foco.
El pasado jueves se produjo el primer encuentro entre representantes del Ministerio de Agricultura y de las organizaciones agrarias nacionales así como del sector exportador para abordar esta problemática. Durante el mismo, la Subdirección de Sanidad Vegetal anunció la elaboración de un Real Decreto con el que tratar de frenar la expansión de esta plaga, con medidas preventivas como la instalación de trampas con feromonas así como la obligación de utilizar doble mayado en las puertas y ventanas de los invernaderos para impedir la entrada de la polilla. La Subdirección, sin comprometerse ni en los plazos para su aprobación ni en la dotación presupuestaria, sí aprovechó la reunión para criticar –en clara alusión a AVA-ASAJA– la “actitud irresponsable y alarmista” de quienes denunciaron la introducción de la Tuta Absoluta.
“Lo que no es admisible es la irresponsabilidad y la hipocresía del MAPA por no haber controlado la plaga antes de entrar en el país y de querer trasladar la culpa a la organización agraria que denuncia que la plaga está aquí haciendo daño a nuestros agricultores”, lamenta el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado. Por este motivo AVA-ASAJA insta a los productores de tomate valencianos a que informen sobre los daños causados en su explotación por esta polilla para así poder evaluar el perjuicio económico global y en su caso reclamar indemnizaciones “al responsable de todas estas pérdidas que es el Gobierno”, matiza Aguado.
Tal actitud, de hecho, contrasta con la mantenida por la Conselleria de Agricultura que ya en verano y al poco de detectarse los primeros focos comenzó a repartir gratuitamente fitosanitarios y que recientemente emitió una nueva orden por la que se presta asesoramiento técnico para mejorar los tratamientos, se insta a declarar todas las producciones de tomate y se ofrecen ayudas al arranque de hasta 3.000 euros por hectárea a los titulares de parcelas afectadas.
De igual manera y para que no se repita una situación análoga a la que ahora se sufre con la Tuta absoluta, AVA-ASAJA ya ha advertido al Ministerio de Agricultura para que refuerce los controles en las importaciones de plantas y semillas de tomate procedentes de los Países Bajos porque se ha a detectado un nuevo foco de una peligrosa enfermedad de cuarentena que ya fue detectada el año pasado en esa misma zona. Se trata de la “Clavibacter michiganensis, subespecie michiganensis”, que es el responsable de la enfermedad conocida como Chancro Bacteriano y que también puede producir graves daños a las plantas de tomate. La bacteria se puede transmitir por medio de semillas, tallos jóvenes, frutos e incluso a través de las labores del cultivo.
AVA-ASAJA