La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) afirma que la quema controlada de la paja del arroz, fruto del acuerdo alcanzado entre los presidentes de los "tancats" y el Ayuntamiento de Valencia, es necesaria para evitar perjuicios mayores a los arroceros de La Albufera y pide comprensión a la sociedad por las molestias ocasionadas.
"Dada la escasa rentabilidad que hoy en día tiene el cultivo del arroz en nuestro territorio, esta es la única práctica que, de momento, resulta viable para los agricultores que, por supuesto, apuestan por disminuir al máximo los problemas que pueda ocasionar el humo a la población valenciana", manifiesta el presidente de AVA, Cristóbal Aguado.
Los arroceros valencianos tienen que soportar enormes limitaciones en cuanto a prácticas de cultivo por encontrarse ubicados dentro de espacios protegidos, hecho que supone, además, una inestimable contribución al mantenimiento del ecosistema para el disfrute de toda la sociedad.
Con la quema controlada de la paja del arroz se procura causar el mínimo perjuicio posible al entorno, hecho que se está reduciendo cada año. Sólo con la ayuda de la Administración se podría plantear un cambio de sistema, que el sector no puede asumir como consecuencia de su enorme coste.
AVA-ASAJA