Nota de AVA-ASAJA
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) pide al Gobierno valenciano ayuda para reconvertir el sector agrario, de la misma manera que se está haciendo con otros sectores tradicionales amenazados por los efectos perniciosos de la globalización, como el calzado, el azulejo o el mueble.
La organización agraria considera que el campo es actualmente “el mayor perjudicado” por los efectos del dumping social llevado a cabo por los países en vías de desarrollo, “que abaratan su producción privando de derechos laborales a sus trabajadores e ignorando las medidas básicas de control medioambiental y sanitario, debido a su conformación política prácticamente feudal”, precisó el presidente de AVA, Cristóbal Aguado.
Según datos oficiales, en los últimos 12 años, el sector agrario ha perdido el 27% de sus trabajadores activos, pasando de 107.500 a los 78.500 de 2002, así como el 9,4% de su superficie cultivada, que en 2002 se situó en torno a las 800.000 hectáreas. Por otro lado, la inversión en el sector agrario, tanto pública como privada, ha descendido un 25% respecto a la efectuada durante los 90, hasta llegar a los 847 millones de euros de 2002.
A ello hay que sumar el descenso continuado de los precios percibidos por los productores, especialmente exagerado en la Comunidad Valenciana, en comparación con el resto de España y con la Unión Europea. Así, en 2002 los precios en origen bajaron un 13,8% en la Comunidad, un 8,09% en España y sólo un 1,4% en la UE, “lo que demuestra el declive de la agricultura mediterránea respecto a la continental”, subrayó Aguado.
Por otro lado, el envejecimiento del sector no ha dejado de aumentar en los últimos años, situándose el 59,2% de los titulares agrarios por encima de los 55 años, según la Conselleria, cuando en otros sectores este grupo de edad representa el 10,4% del total de la población activa. Sólo el 7,7% de los agricultores tiene menos de 24 años.
“Los efectos negativos de la apertura de los mercados en la agricultura valenciana, a la vista de estos datos, es evidente, por lo que desde AVA consideramos necesario que, al igual que se va a hacer con otros sectores, el Consell apoye un plan de reconversión y modernización, que permita aumentar la inversión, reforzar el papel de las explotaciones familiares agrarias y facilitar la incorporación de jóvenes al sector, entre otras medidas”, reclamó Aguado.
“Y es que el sector agrario valenciano”, continuó, “dada su estructura minifundista y excesivamente parcelada, no puede deslocalizar su producción, como hacen las grandes multinacionales para hacer frente al fenómeno de la globalización”, matizó Aguado.
Al mismo tiempo, AVA demandó que el apoyo interno venga acompañado de una política exterior coherente con la defensa de la agricultura mediterránea, a través de compromisos sociales y de gestión en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC), así como con la consecución de una normativa internacional de trazabilidad y de equiparación de residuos químicos tolerables y productos fitosanitarios, para que, según Aguado, “todos juguemos en el mercado global con las mismas reglas”
AVA-ASAJA