La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) pide al Gobierno la declaración de zona catastrófica para el área citrícola valenciana por los daños de pixat y caída fisiológica por frío sufridos en la presente campaña que actualmente no se encuentran cubiertos por el seguro agrario.
Según la organización agraria, los daños por estas circunstancias, tanto en clementinas como en clemenvillas, hernandinas y otros híbridos, superan ya los 25.000 millones de pesetas ( más de 150 millones de euros), de los cuales, más de 11.000 millones de pesetas (unos 67 millones de euros) corresponderían directamente a jornales perdidos, datos que «de seguir así el tiempo, se irían multiplicando con los días», lamenta el presidente de AVA, Cristóbal Aguado.
AVA considera que, puesto que no existe actualmente un seguro que cubra dichos riesgos, a pesar del compromiso adquirido por el Ministerio de Agricultura hace dos años, el Consorcio de Compensación de Seguros debería hacerse cargo de estos daños, pagando a todos los citricultores que tengan en vigor su seguro agrario.
Al tiempo, solicita al Ministerio de Agricultura exenciones fiscales y créditos blandos para todos los afectados, así como la inclusión de estos riesgos en el nuevo Plan de Seguros Agrarios de la Entidad Nacional de Seguros (Enesa) para este año. «Es totalmente discriminatorio que el riesgo de pixat sólo sea susceptible de ser asegurado para aquellos agricultores que estén en organizaciones de productores de cítricos (OPC) de Castellón, por lo que exigimos que entre las novedades propuestas por Enesa para este año, como la cobertura para lluvias persistentes, esté incluido el pixat para toda la Comunidad Valenciana», apunta Aguado.
AVA-ASAJA