Según COAG, los bajos precios a escala europea, a pesar de que la producción cerealística se ha visto igualmente reducida en más de un 7%, han provocado que las importaciones de cereal se disparen.
Así, durante los siete primeros meses de 2009 se importó a España un 139% más de trigo que en los mismos meses del 2008, hasta 3,15 millones de toneladas, y un 410% más de cebada, hasta 0,58 millones de toneladas, situación que, en opinión de la organización agraria, ha agudizado la tendencia a la baja de los precios en el mercado interno.
«La eliminación de los mecanismos de regulación de mercado tras las últimas reformas de la Política Agraria Común (PAC) deja al agricultor sin ningún instrumento para afrontar los vaivenes del mercado mundial de cereales, muy condicionado por la espiral especulativa que se ha adueñado de las cotizaciones de las materias primas en los últimos tiempos», señaló el responsable de Producciones Agricolas, Alejandro García-Gasco.
Si no cambia esta tendencia, COAG pronosticó una nueva reducción de la superficie sembrada para la próxima campaña y el consiguiente aumento de la dependencia del exterior. «En estas condiciones, sembrar es una opción totalmente inviable para gran parte de los productores», lamentó García-Gasco.
Por ello, COAG abogó por el reestablecimiento de los mecanismos de regulación de mercado para que los agricultores puedan reducir la incertidumbre a la hora de planificar sus campañas, en un marco de equilibrio y seguridad que limite la influencia de la especulación.
Europa Press