Los socios de las entidades asociadas a Fecoam representan aproximadamente el 33% de la producción de la Región y sus entidades el mismo porcentaje de la comercialización, dirigida prioritariamente a la Unión Europea y a los países de su entorno.
El volumen comercializado por las cooperativas durante el periodo que transcurre desde octubre de 2009 a octubre de 2010 sumó 180.024 toneladas de fruta dulce, uva, almendra y aceituna; 99.950 toneladas de cítricos; 464.851 toneladas de hortalizas y 2.430 de arroz (un 3,8% más). En total fueron 747.254 toneladas, frente a las 787.199 de 2009.
Por sectores, las cooperativas hortícolas fueron las más beneficiadas de la campaña. Todos los cultivos dieron beneficios, a excepción del melón amarillo (-524.000 euros) y la alcachofa (-973.000). Los citricultores también tuvieron un buen año, con 9.528.000 euros de beneficio, mientras que los propietarios de frutales obtuvieron resultados mediocres. El albaricoque, el melocotón amarillo, la ciruela y la pera dieron pérdidas, compensadas en parte con los excelentes precios que obtuvieron el melocotón rojo, la nectarina, el melocotón paraguayo y la uva de mesa.
El mayor varapalo recayó sobre los viticultores, almendricultores y olivareros, cuyos socios sumaron pérdidas por valor de 2.568.000 euros.
Fecoam volvió a demostrar su capacidad de proporcionar empleo en tiempos de crisis económica. Durante el año pasado dio trabajo a más de 48.000 personas entre trabajadores en los almacenes de manipulación (8.113) y explotaciones (21.132), así como los propios socios (19.000) de las cooperativas.
El presidente de la organización, Santiago Martínez Gabaldón, reclama un mayor apoyo de las entidades financieras para las cooperativas agrarias de la Región. La situación de crisis actual no sólo afecta comercialmente al sector agrario regional, debido a la fuerte presión de la gran distribución para la bajada de los precios en origen, sino que también provoca una escasez de financiación por desconfianza de las entidades de crédito.
El presidente de Fecoam recuerda, asimismo, que continúan incrementándose los costes de producción por el aumento de los precios de carburantes, fertilizantes o piensos, así como de la tierra y el agua. Por otro lado, el coste del material vegetal también supone un desembolso importante para los cooperativistas, debido a los royalties que pagan por la producción de fruta de determinadas variedades.
Fecoam advierte que todos los esfuerzos de las cooperativas para hacer frente al incremento de los costes de producción por el aumento de los precios de carburantes, fertilizantes o piensos, así como las inversiones para modernizar sus instalaciones e implantar sistemas de calidad, no se traducen en unos adecuados ingresos para el productor. Se mantienen unos precios bajos en origen y muy altos en destino, lo que pone de manifiesto la necesidad de establecer medidas que velen por un precio justo y ético a recibir por el agricultor y a pagar por el consumidor.
Martínez Gabaldón también se lamenta de los acuerdos entre la Unión Europea con países no comunitarios, como Marruecos, con costes de producción muy bajos, que afectan gravemente a las zonas productoras de frutas y hortalizas como la Región de Murcia. Por ello, pide que se vigilen los contingentes importados de forma muy rigurosa, “para que no se pase ningún kilogramo de lo que está pactado”.
Además, reclama una mayor igualdad de condiciones con los productores de fuera de la Comunidad Económica Europea, que cumplen unos parámetros menos rigurosos en cuanto a calidad y fitotoxicidad de los alimentos al acogerse a las normas de la Ley Mundial del Comercio, lo que perjudica seriamente a los productores europeos que cumplen criterios de calidad muy superiores.
Fecoam