La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha declarado las Bardenas Reales de Navarra “Reserva Mundial de la Biosfera”, iniciativa promovida por el Departamento de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda. Cabe recordar que el pasado 6 de abril el Departamento presentó al Consejo Asesor del Parque Natural de Bardenas Reales el documento en el que se basó la solicitud remitida a la UNESCO. De hecho, durante la última semana del pasado mes de octubre 130 expertos medioambientales de los cinco continentes analizaron en Pamplona, en el congreso “Sevilla+5”, una veintena de propuestas que esperaban recibir la declaración de Reservas Mundiales de la Biosfera, entre las que se encontraba la de las Bardenas Reales de Navarra. Desde el lunes 6 de noviembre, un Comité Técnico de la Red de Reservas de la Biosfera se ha reunido en París, sede de la UNESCO, donde se ha tomado la decisión definitiva. Bardenas Reales de Navarra se ha convertido en la decimoséptima Reserva Mundial de la Biosfera existente en España, y la primera ubicada en la Comunidad Foral. Junto a Bardenas Reales, el Comité de Expertos anunció en la tarde de ayer, jueves 9 de noviembre, que las dos propuestas remitidas desde el Principado de Asturias (Somiedo y Muniellos), también habían sido declaradas Reservas de la Biosfera. De esta manera, actualmente existen en España 19 Reservas de la Biosfera. HISTORIA Y CREACIÓN DE ESTAS RESERVAS Las Reservas de la Biosfera están recogidas dentro del programa MaB (Hombre y Biosfera) de la UNESCO, iniciado en 1970 y cuyo objetivo es hacer compatible la conservación con el uso sostenible de los recursos naturales y el mantenimiento de los valores culturales a través de la investigación y la formación. El concepto de Reserva de la Biosfera fue elaborado en 1974 y se entienden como áreas de ecosistemas terrestres o costeros marinos reconocidas internacionalmente dentro del citado programa. Estas Reservas cumplen con los requisitos planteados en la Cumbre de la Diversidad Biológica de Río de Janeiro (1992), que recogen entre sus objetivos la conservación de la diversidad biológica, el uso sostenible de sus elementos y una distribución justa y equitativa de los beneficios derivados de la explotación y de los recursos genéticos. Esta situación fue ratificada en la Conferencia Internacional de Reservas de la Biosfera, celebrada en noviembre de 1995 en Sevilla. Las Reservas de la Biosfera constituyen una Red Mundial en cuyo seno se promueve el intercambio de información, experiencias y personal científico, en especial entre aquellas con tipos de ecosistemas semejantes y/o con experiencias similares en la solución de problemas relacionados con la conservación y el desarrollo. La Red Española de Reservas de la Biosfera se constituyó en junio de 1992, en la reunión celebrada en la Reserva de la Biosfera de Ordesa-Viñala. LA PROPUESTA DE LAS BARDENAS REALES DE NAVARRA La zona propuesta de las Bardenas Reales de Navarra para su declaración como Reserva de la Biosfera coincide con el territorio del Parque Natural, que cubre una superficie de 41.845 hectáreas, y al que se le quieren añadir las áreas riberas fluviales de los ríos Aragón y Ebro. Para que un área sea declarada Reserva de la Biosfera debe brindar la oportunidad de estudiar y mostrar la filosofía de desarrollo sostenible dentro de la región en la que está ubicada y tiene que disponer de un sistema de zonificación apropiado, con zonas núcleo (protegidas legalmente), zonas de transición (actividades agrícolas, ganaderas y asentamientos humanos) y zonas de amortiguación (rodea a la zona núcleo). De igual manera, debe ser representativa de una región biogeográfica y contener paisajes, ecosistemas, especies o variedades de animales y plantas que requieran ser conservados. Cada Reserva de la Biosfera alberga tres funciones básicas, que se complementan y se refuerzan entre sí: conservación, desarrollo y apoyo logístico para la investigación y la educación. De hecho, son áreas donde los habitantes pueden utilizar los recursos naturales de manera sostenible, sin ponerlos en peligro. Asimismo, son lugares excepcionales para la investigación científica. Desde el Departamento de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda se considera que Bardenas Reales reúne las condiciones necesarias para el cumplimiento de los tres objetivos básicos de las Reservas de la Biosfera, ya que la singularidad e interés de sus paisajes se unen al alto grado de naturalidad y de biodiversidad y, por tanto, de conservación de sus hábitats y de su vegetación. De hecho, la flora y vegetación bardeneras han formado parte del Inventario Nacional de Hábitats elaborado al amparo de la Directiva Europea de Flora, Fauna y Hábitats.
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