No hace falta ser un científico para darse cuenta de que el medio ambiente se está deteriorando. Una manera sencilla de reducir el impacto es utilizar bolsas biodegradables. Las bolsas de plástico están fabricadas con polietileno extraído del petróleo, mientras que las bolsas biodegradables están hechas con materiales que se decomponen con el tiempo por el efecto de la luz, el oxígeno o la humedad.
La empresa de productos ecológicos Bambú Bolsas fabrica bolsas biodegradables compostables de tipo camiseta para uso comercial. Este tipo de bolsas son adecuadas para transportar alimentos adquiridos en supermercados y tiendas, cumplen con la normativa comunitaria EN-13432 y se descomponen de forma totalmente natural.