Los consumidores en España se gastaron una media de 1.226 euros en 2003 para su consumo doméstico. Del gasto total, -en Hogares, Hostelería y Restauración, así como Instituciones-, el 22 por ciento lo destinaron a la compra de carne y derivados, si bien el consumo de este producto se mantuvo constante en relación con el año anterior. Los que sí registraron un aumento en el consumo fueron los productos de la pesca, que representan un 14 por ciento del total de gasto, y las frutas frescas, que absorben el 7 por ciento. Estos son algunos de los datos recogidos en el Panel de Consumo Alimentario del año 2003 que presentó hoy el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Miguel Arias Cañete.
Los resultados de este estudio pormenorizado sobre el consumo y gasto en alimentación en hogares, establecimientos de hostelería y restauración así como en centros institucionales durante el año 2003 también muestran que la cantidad de alimentos consumidos ese año experimentó un incremento del 2,1 por ciento respecto al año anterior. Esta subida ha estado motivada principalmente por el aumento de la población.
Por su parte, el gasto total en alimentación ascendió a 69.406,2 millones de euros, lo que representa un 4,8 por ciento de incremento con respecto a 2002. Este dato refleja una tendencia más moderada en el gasto, si lo comparamos con el aumento registrado el año anterior, que alcanzó el 7,8 por ciento.
En cuanto a la distribución del consumo, el mayor crecimiento se produjo este año en la Hostelería y Restauración, con una subida del 2,8 por ciento, seguidos por las Instituciones, con un 2 por ciento, y los Hogares, con un 1,8 por ciento. No obstante, la distribución del gasto entre los tres sectores se mantiene más o menos estable desde 1997, con un reparto a los hogares del 73,1 por ciento de lo gastado y un 26,9 por ciento en la restauración e instituciones.
Por otro lado, el aumento de precios en 2003 ha sido más moderado que en 2002 -al igual que el gasto-. Con un incremento del 3 por ciento, ha reducido a la mitad la subida en un 6 por ciento registrada el año anterior.
Sin embargo, estos datos sobre precios no son comparables al IPC, ya que el cálculo de este índice resulta de la elección de una serie de alimentos, ponderados por su importancia relativa dentro del gasto familiar, mientras que en el Panel de Consumo se obtiene el precio medio al dividir el gasto total efectuado en un producto entre el volumen comprado.
El Panel incluye también un análisis de la evolución del gasto y consumo de los principales productos que componen nuestra alimentación. Además, este año el estudio aporta algunas novedades, como la inclusión de cifras sobre el consumo de productos ecológicos, de carnes certificadas, de leches y zumos enriquezidos, y de frutas/verduras con presentaciones de IV y V Gama.
GRUPO DE LA CARNE
Así, el consumo medio del total de carne ha sido de 67,6 Kg per cápita y año, y su representación sobre el gasto total se ha mantenido, al igual que en 2002, en el 22 por ciento. Sin embargo, esta estabilidad la ha propiciado el incremento en un 4,9 por ciento del consumo de carne de vacuno, frente a los descensos registrados en otras carnes.
Por otro lado, el estudio refleja por primera vez datos sobre la carne certificada, a la que ha correspondido un 14 por ciento sobre el total de la carne fresca comprada.
Por Autonomías, las más consumidoras han sido Castilla y León, La Rioja y Aragón, y cierran la lista Canarias, Murcia y Andalucía.
PRODUCTOS DE LA PESCA
Los productos de la Pesca, segundo grupo en cuanto a porcentaje de gasto sobre el total en la alimentación, con un 14 por ciento y un consumo medio de 36,5 Kg per cápita y año, continúan su ascenso con un incremento del 0,8 por ciento en consumo y 2,9 del precio.
Por Comunidades, encabezan la lista Castilla y León, Asturias, y La Rioja, frente a las menos consumidoras, que han sido Canarias, Baleares y Murcia.
LECHE Y DERIVADOS
La evolución en el consumo de productos lácteos varía según se trate de leche líquida o derivados lácteos.
La primera ha sufrido un descenso en su consumo, del 1,9 por ciento, y ha disminuido su precio en un 0,5 por ciento.
Las leches enriquecidas, de las que se ofrecen por primera vez los datos por separado, han alcanzado el 16 por ciento sobre el total de leche líquida.
Por contra, los derivados lácteos han registrado un incremento en e consumo de casi el 3,5 por ciento, con 36 Kg por habitante y año. También el precio aumentó en 2003 un 3,2 por ciento.
PAN, BOLLERÍA Y PASTELERÍA
En 2003 se consumieron 57 Kg de pan por habitante, lo que ha supuesto un descenso del 1,2 por ciento. El precio también ha bajado un 0,5 por ciento.
En bollería y pastelería el incremento fue del 3,6 por ciento, al consumirse en España 13,7 Kg per cápita y año. El precio descendió un 0,4 por ciento.
ACEITE
Dentro del grupo de los aceites, el de oliva ha tenido igual consumo que en 2002, con 12,7 litros por persona y año, si bien el volumen total ha subido un 1,2 por ciento. Se dividen estos aceites en los de oliva, con un incremento del 2 por ciento y un consumo de 9,6 litros per capita, y el de oliva virgen, que, por primera vez en los últimos años ha registrado un pequeño descenso del 1 por ciento. No obstante, el consumo de aceite de oliva virgen se mantiene por encima del 24 por ciento del total de Aceite de Oliva.
El aceite de oliva y de oliva virgen participan con el 61 por ciento del consumo total de aceites, el de girasol representa el 33 por ciento y sólo el 6 por ciento es consumo de otros aceites.
Andalucía, y La Rioja son las CC.AA más consumidoras de aceite de oliva virgen, mientras que Castilla-La Mancha y Valencia han sido las menos.
FRUTAS Y HORTALIZAS
Las hortalizas, con 66,6 kg per cápita y año, han presentado un incremento del 3,7 por ciento en consumo, y absorben el 5 por ciento del gasto total en la alimentación. Cataluña, Aragón y Valencia se encuentran a la cabeza en cuanto a consumidoras. Cantabria, Extremadura y Galicia, son las tres comunidades donde menos hortalizas se consumen.
Las verduras/hortalizas ecológicas representan un 11 por ciento del consumo total de hortalizas frescas.
En cuanto a las frutas, su consumo ha sido de 100,7 kg por persona y año, un 3,5 por ciento más que en el año anterior. Estos datos reflejan un cambio en la tendencia observada del 87 al 99 y confirman la recuperación del consumo de un producto tan importante para la salud, que representa el 7 por ciento del gasto total.
Los mayores consumidores de frutas se encuentran en Castilla-León, Cataluña y Navarra, frente a los menos: Murcia, Canarias y Andalucía.
CONSERVAS Y PLATOS PREPARADOS
Las frutas y hortalizas transformadas han aumentado su consumo en un 1 por ciento y registran un consumo per cápita de 17,4 Kg.
El aumento de consumo de los platos preparados, en un 9 por ciento, al alcanzar los 10Kg por persona, se debe a una serie de valores añadidos de estos productos que el consumidor aprecia, como son la facilidad de su preparación, el ahorro de tiempo que representa y su buena percepción organoléptica. El sector industrial debe tener en cuenta estas razones, de forma que cuide al máximo el proceso de elaboración, para que no se desvirtúen las características nutricionales ni se descuide la textura y el sabor.
No obstante, cabe señalar que su consumo representa sólo el 2 por ciento del gasto total, lo que nos indica que nuestra alimentación tradicional no corre peligro.
VINOS Y OTRAS BEBIDAS
El consumo en Hogares de vinos con denominación de origen ha experimentado un incremento del 3,7 por ciento, si bien se ha producido un descenso del 8 por ciento en el sector de la Hostelería/Restauración. Esto ha hecho que el consumo per capita sea de 7,5 litros, lo que supone un descenso total del 5 por ciento. En el precio se ha registrado un aumento del 3,5 por ciento.
En cuanto a los vinos de mesa, prosigue su descenso continuado observado en años anteriores, ya que los 18,8 litros por persona y año representan una disminución del 3,8 por ciento. Por el contrario, el precio también bajó un 0,8 por ciento.
El porcentaje de gasto sobre la alimentación total ha sido del 1,7 por ciento para el V.C.P.R.D y del 1,3 por ciento para el de mesa.
La distribución con respecto al consumo total de vinos, que en 2003 se ha situado en 28,2 litros por persona y año, es del 66,6 por ciento para los vinos de mesa, el 26,4 por ciento para los de calidad y el 7 por ciento para el resto, considerando como tal a los espumosos y otros vinos (finos, amontillados, olorosos, vermuts, etc).
Las cervezas, con un consumo de 57,5 litros per cápita y año han aumentado en un 7,5 por ciento el consumo del año 2002. Por su parte, las bebidas de alta graduación, con 4,8 litros por persona y año, han registrado un incremento del 7,7 por ciento.
CONCLUSIONES
Después de analizada la evolución del consumo y gasto alimentario en 2003 observamos la tendencia generalizada, por parte del consumidor, y ya apuntada en los años precedentes, por tratar de mantener una dieta que se aproxime más a la Dieta Mediterránea, debido a que el ciudadano muestra un mayor conocimiento de las características nutricionales de los alimentos y de la influencia beneficiosa de la alimentación en la salud. Por este motivo, se mantiene el crecimiento en el consumo de frutas y hortalizas frescas, fundamentales dentro de nuestra cultura gastronómica, ha aumentado el consumo de aceite de oliva -si bien se ha mantenido constante el de oliva virgen-, fuente principal de grasas en nuestra cocina; y del pescado, como fuente importante de proteína.
También debemos resaltar la preferencia del consumidor por los productos bajos en grasas y en azúcares, como medio de controlar su peso, y por los platos preparados o semipreparados, que requieren menor tiempo para su elaboración
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