Este programa comunitario de desarrollo rural y el Proder II, que ya fue aprobado por la Unión Europea, supondrán una inversión de 45.000 millones de pesetas durante el período 2000-2006, que serán cofinanciados con fondos europeos, el Gobierno regional, la Administración central, administraciones locales y sector privado, y beneficiarán al 95% de los municipios de la región y al 68,7% de los castellano-manchegos.
La Comisión Europea ha notificado a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente que el pasado 31 de julio ha sido aprobado el Programa regional para la aplicación de la iniciativa comunitaria Leader Plus en Castilla-La Mancha (2000-2006), así como que dicha decisión será publicada en los próximos días.
Con el programa Leader Plus y el Proder II, que ya fue aprobado por la UE, en Castilla-La Mancha se invertirán 45.000 millones de pesetas en materia de desarrollo rural, inversión que será cofinanciada por la UE (FEOGA y FEDER), las administraciones regional, central y local, y el sector privado.
Así y según el mapa de desarrollo rural de Castilla-La Mancha, que fue aprobado por unanimidad en las Cortes regionales en mayo de 2000, estas dos iniciativas comunitarias beneficiarán al 95% de los municipios de la región y al 68,7% de los castellano-manchegos.
El director general de Desarrollo Rural, Miguel Chillarón, dijo que, una vez aprobado este programa, por el que hemos recibido numerosas felicitaciones del personal de las direcciones generales VI y XI de la Comisión Europea, la Consejería publicará la Orden de convocatoria para que los grupos de acción local presenten sus proyectos en la primera quincena del próximo mes de septiembre.
Sobre el Leader Plus, Chillarón señaló que esta nueva iniciativa refuerza el protagonismo de la población local y sus instituciones, profundizando en el diálogo y la colaboración entre los agentes sociales, económicos e institucionales. Asimismo, indicó que el Leader incide en el carácter innovador de las estrategias de desarrollo; regula el tamaño máximo y mínimo de los territorios; refuerza los mecanismos de colaboración entre los diversos grupos de acción local; diseña los grupos como representativos del tejido social; y establece como requisito imprescindible que los representantes políticos o de las Administraciones en el grupo de acción local representen no más del 50% del total de sus miembros.
Nuevo mapa de desarrollo rural de Castilla-La Mancha
La elaboración del nuevo mapa de desarrollo rural de la región se realizó tomando como base un estudio realizado por la Universidad de Castilla-La Mancha y CEDERCAM, asociación que reúne a la mayoría de los grupos de acción local de nuestra Comunidad Autónoma. La metodología seguida en la elaboración de este estudio, en el que se determina con diferentes criterios geográficos, económicos, humanos, históricos y de población- el mapa de desarrollo rural para nuestra región ha sido muy rigurosa.
Así, para la definición de los territorios, sobre los que actuarán cada futuro grupo de acción local, se han tenido en consideración los siguientes factores planteados en el estudio de la Universidad y CEDERCAM: exclusión de los territorios o zonas que sobrepasen los 100.000 habitantes y no lleguen a 10.000; territorios con homogeneidad física (zona de montaña, llanura, etc.), territorios con homogeneidad económica; territorios con homogeneidad social; territorios pertenecientes a una misma provincia; y determinados recursos económicos mínimos en el territorio (renta, capacidad de consumo, etc.)
Quedarían excluidos de este mapa sólo las capitales de provincia y zonas de claro desarrollo industrial, dijo Chillarón, quien añadió que esto supone que se beneficiarán de estos programas el 68,7% de los castellano-manchegos y el 95% de los municipios.
Estos nuevos programas de desarrollo rural se articularán para conseguir los siguientes objetivos: mejorar la calidad de vida en el medio rural, mantener y consolidar un tejido social viable en el medio rural, mediante la mejora del entorno económico y la diversificación de la actividad económica, encaminados a la creación de empleo; y la dinamización de la población rural, fomentando el papel de la mujer y de los jóvenes.
También se pretende fomentar la utilización de nuevos conocimientos y tecnologías; mejorar la capacidad de organización de las respectivas comunidades para lograr el acceso a los mercados y la revalorización de los productos locales; la conservación, mejora y valorización
JCCM