Los 54 análisis para detectar la Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) que se han realizado en los laboratorios de Castilla-La Mancha –Albaladejito (Cuenca) y Talavera de la Reina (Toledo)- han resultado todos negativos.
Estos dos laboratorios comenzaron a funcionar en el día de ayer, ya que hasta entonces las muestras para realizar los llamados “test priónic” se han estado enviando a los Laboratorios Nacionales de Algete (Madrid) y de Zaragoza.
En el laboratorio de Cuenca se han realizado 32 análisis de muestras procedentes todas ellas de matadero, mientras que en el de Talavera se han realizado 21 análisis de muestras procedentes de mataderos y 1 muestra procedente del cadáver de una res de una explotación ganadera de la región.
En sólo dos días de funcionamiento se han realizado ya más análisis que a lo largo de todo el mes de enero, que como se recordará fueron un total de 51, también todos negativos.
Los “tests priónic” se realizan obligatoriamente, según determina la legislación, a los bovinos mayores de 30 meses que se dirijan al consumo alimentario; a los mayores de 20 meses nacidos en países de riesgo (Francia, Irlanda, Suiza y Portugal); y en los sacrificios de urgencia. Además, y en cumplimiento de los acuerdos suscritos con el Ministerio, en Castilla-La Mancha se realizarán 218 pruebas aleatorias durante el año 2001.
El resultado negativo de estos análisis garantiza y da completa seguridad al consumidor de que la carne de vacuno que llega a las carnicerías ha pasado por todos los requisitos legales y es apta para el consumo.
GABINETE DE PRENSA