Nota JCCM
La Consejería de Medio Ambiente de Castilla-LM destinará este año un total de 3.754.227 euros para clausurar 114 vertederos incontrolados o que han llegado al final de su vida útil ubicados en distintos municipios de Castilla-La Mancha, dando así cumplimiento al Plan Regional de Residuos Sólidos Urbanos.
La responsable de la Consejería, Rosario Arévalo, explicó que el Plan de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos de Castilla-La Mancha, aprobado en 1999, tiene, entre sus objetivos principales, clausurar los puntos de vertido incontrolado de toda la comunidad autónoma y recuperar estos espacios degradados.
Con el sellado de los vertederos previstos para este año serán un total de 417 los clausurados en toda la Comunidad Autónoma, y la inversión que se ha realizado por parte del Gobierno regional ha ascendido a más de 9.500.000 euros.
“Nuestro interés fundamental es acabar con este tipo de vertederos porque son un foco de contaminación, un riesgo sanitario e, incluso, una potencial fuente de incendios, de ahí el importante esfuerzo presupuestario que estamos realizando”, indicó la titular de Medio Ambiente.
Arévalo resaltó que hasta hace unos años se concentraban todos los residuos generados por los ciudadanos y ciudadanas en vertederos, algunos de ellos incontrolados, y ahora lo que se busca es su reutilización y revalorización a través de las plantas de tratamiento existentes en toda la Comunidad Autónoma.
Al respecto, la consejera de Medio Ambiente subrayó que la política del Ejecutivo regional, que se recoge en el Plan de Residuos, aboga por prevenir la generación de residuos, reducirlos en la medida de lo posible y fomentar su reutilización y reciclaje.
“Todos somos conscientes de que los recursos que nos ofrece la naturaleza se agotan y, por ello, debemos hacer todo lo que esté en nuestro mano para propiciar la reutilización y revalorización de nuestros residuos, es el futuro por el que debemos apostar”, dijo la consejera, quien apuntó que también deben ser considerados como una fuente de empleo y riqueza.
Los trabajos que realiza la Consejería de Medio Ambiente para que la clausura del vertedero sea la adecuada implican actuaciones, como el aislamiento mediante sellado superficial y restauración vegetal, el drenaje y desviación de posibles escorrentías que circulen a su través y el drenaje del lixiviado antes de que penetre y pueda alterar la calidad de las aguas subterráneas.
JCCM