El director del Observatorio de la Leche de Cataluña, Antoni Seguí, ha explicado a Efe que a pesar de que el número de explotaciones ha descendido en un porcentaje muy elevado, la cuota lechera ha aumentado ligeramente en esta comunidad, donde se ha pasado de las 544.472 toneladas producidas en total en 1999 a las 552.646 del pasado año.
Esta situación se debe, básicamente, a que el número de explotaciones de vacas de leche de pequeño tamaño, con una cuota de leche de menos de 250 toneladas, se ha reducido drásticamente y ha pasado de 1.216 existentes en 1999 a 227 en 2008, mientras su cuota ha descendido también de las 129.247 toneladas a 32.432.
Las explotaciones de menos de 250 toneladas han pasado de controlar el 23,74% de la cuota a sólo el 5,87%, mientras que las de más de mil toneladas han pasado de tener el 26,15% a la mitad del total de la cuota, el 50,42%, según datos de la Generalitat.
La desaparición de numerosas pequeñas explotaciones de vacuno de leche ha cambiado el panorama del sector lechero en Cataluña, donde se depende en gran medida del exterior para alimentar a los animales, con lo que los ganaderos deben tener muy en cuenta también la evolución de los precios de los cereales a la hora de planificar su futuro.
Ante esta situación, la organización agraria Unió de Pagesos reclama el apoyo decidido de la administración catalana para evitar el cierre de más explotaciones, «que supondría el desmantelamiento del sector», según ha indicado el responsable nacional de Unió de Pagesos del sector lechero, Joan Guitart.
El observatorio catalán, creado en 2006, recoge datos técnicos y económicos de unas 50 explotaciones de vacas cada trimestre para analizar la situación del sector y las diferentes problemáticas que le afectan, además de ofrecer asesoramiento a los productores. También estudia los precios pagados y percibidos por los productores, y analiza la gestión técnica y económica de los costes de producción y la situación de oferta y demanda de los productos lácteos en el mercado.
Así, según el informe de los precios en el sector lechero del pasado año 2008 con relación a 2007 elaborado por el Observatorio, el precio base de la leche aumentó un 6,75% y el precio percibido por el productor, un 6,33%, si bien la evolución fue de un descenso continuo de los precios. En 2008, se pasó de los 44,97 céntimos por litro percibidos por el granjero a principios de año a los 37,63 céntimos el mes de diciembre, con una media anual abonada de 39,83 céntimos por litro.
A estos precios base se suman las primas de calidad higiénica sanitaria, de volumen, distancia al centro de recogida y otras modalidades, con el que se obtiene el precio percibido, que el pasado año osciló entre los 40,31 céntimos por litro de media anual cuando el comprador fue una industria, y los 38,81 céntimos por parte de una cooperativa o centro de recogida.
La difícil situación que vive el sector productor ha llevado a las principales organizaciones agrarias catalanas a sumarse a la protesta que se ha convocado para el próximo día 16 de abril ante la sede del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, por la grave crisis que atraviesa el sector. Los sindicatos agrarios demandan que las administraciones estatal y autonómicas apoyen a los ganaderos que viven de esta actividad económica, que en Cataluña cuenta con una larga tradición e importancia para el tejido productivo catalán.
Los productores también se quejan de las importaciones de leche de otros países, principalmente de Francia, a bajos precios, que inundan el mercado aunque no garanticen la trazabilidad del producto, según ha denunciado el presidente de la Federación Española de Empresarios Productores de Leche (PROLEC), José Ramón Arronte.
EFEAGRO