Esta semana debería ser clave, se ha convocado una reunión ministerial del 28 de junio al 2 de julio de 2006 en Ginebra de cara a alcanzar un acuerdo en julio de 2006 sobre las modalidades de negociación.
Las negociaciones en curso de la OMC, dentro de la denominada Ronda de Doha para el Desarrollo lanzada en 2001 en Qatar, siguen bloqueadas. El reloj corre y el tiempo para alcanzar un acuerdo sobre las modalidades de negociación se agota. La clave de las negociaciones yace en un referido triángulo formado por la UE, EEUU y el G20, liderado por Brasil y la India.
El Presidente del Comité de Agricultura de la OMC, Crawford FALCONER, ha presentado un borrador sobre las modalidades de negociación con numerosos puntos abiertos, más de 700, a discutir aún por los miembros de la OMC.
Crawford FALCONER ha declarado que, en cuanto al acceso al mercado, un posible acuerdo se basaría en la propuesta del G20 que propone una reducción media de los aranceles agrícolas en la UE del 54% frente al 46% contemplado en la oferta inicial de la UE.
Las negociaciones continúan bloqueadas tras el esperado revés que supuso el incumplimiento del primer plazo establecido en la Conferencia Ministerial de la OMC celebrada en Hong Kong en diciembre de 2005. Los miembros de la OMC debían haber alcanzado un acuerdo sobre las modalidades de negociación antes del 30 de abril de 2006. El cumplimiento de este primer plazo hubiese sido determinante de cara a la conclusión con éxito de la Ronda de Doha en 2006.
Aunque las negociaciones agrícolas no constituyen la totalidad de la agenda de la Ronda de Doha, no se puede avanzar en el resto de los asuntos sin un acuerdo previo en materia agrícola.
El éxito de la Ronda de Doha está sujeto a un calendario político debido fundamentalmente a la expiración en EEUU de la TPA (Trade Promotion Authority) o Fast Track en julio de 2007, plazo que el Congreso de EEUU otorgó al Gobierno para negociar un acuerdo multilateral.
La finalización del Fast Track debería impulsar un acuerdo sobre las modalidades de negociación sobre temas muy críticos, como la ayuda interna y el acceso al mercado, a mediados de 2006, preferiblemente en julio de 2006, de cara a la conclusión de la Ronda de Doha en 2006.
Por otro lado, el segundo semestre de 2006 va a resultar complicado para las negociaciones de la OMC, debido a la celebración de elecciones Presidenciales en Brasil y al Senado en EEUU, en octubre y noviembre respectivamente.
La Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del G8, constituido por EEUU, Rusia, Alemania, Reino Unido, Francia, Japón, Italia y Canadá, que se celebrará en San Petersburgo (Rusia) del 15 al 17 de julio de 2006 podría ser determinante de cara a un acuerdo inminente sobre las modalidades de negociación en julio de 2006.
La sensación es que, a medida que se acerca la fecha límite para llegar a un acuerdo sobre las modalidades de negociación, los intereses y las posturas de los diferentes países y bloques son cada vez más divergentes, aunque el Comisario de Comercio de la UE, Peter MANDELSON, estaría dispuesto a llegar a un acuerdo revisando la oferta agrícola inicial de la UE.
La PAC ha experimentado una serie de reformas para poder hacer una oferta constructiva en las negociaciones de la OMC. Las decisiones de la última reforma de la PAC, adoptadas dentro de la Agenda 2000, deben ser la base fundamental para delimitar el mandato de negociación conferido a la Comisión. Sin embargo, la Comisión estaría dispuesta a revisar la oferta agrícola inicial, ya sustancial, formulada en octubre de 2005
CCAE