El responsable regional de la Aceite de Oliva de COAG-Andalucía, Francisco Garrido explicó que la escasez de lluvias ha provocado «estrés hídrico» en la aceituna, lo que ha provocado que «el fruto esté arrugado y tenga un calibre pequeño», lo que supone que la aceituna «no se pueda recoger» en las zonas del olivar de secano.
Asimismo, confió en que se registren precipitaciones «lo antes posible» para ayudar así a que «la aceituna termine de forma eficaz su proceso de maduración y mejoren por tanto, los resultados sobre todo de cara a la próxima campaña».
De este modo, Garrido puntualizó que «aún es pronto» para cuantificar la cantidad total de aceitunas recogidas durante esta campaña, debido a que «ésta acaba de comenzar hace unos 15 días y en el caso onubense no será hasta enero, –fecha en la que culmina la recogida–, cuando se puedan conocer los datos», aunque «todo dependerá de las condiciones climatológicas porque en el caso de que llueva se retrasará la recogida».
Por último, hizo hincapié en que «el precio del aceite está bajo», no obstante confió en que «en que en los próximos meses se recoja aceituna y de calidad para ver si los precios suben un aumento». En la pasada campaña se recogieron unas 900.000 toneladas de aceitunas en Andalucía.
Europa Press