NOTA COAG La caída de precios que se venía produciendo en el sector de porcino desde principios de agosto propició que, los ganaderos entraran en pérdidas al situarse el precio de venta del Kg de carne en matadero por debajo del costo de producción de dicha carne que, entre otras causas, ha estado soportando una media de 8 Ptas. más por Kg debido al incremento del precio de los cereales que se emplean en la fabricación de piensos, en especial la soja, el maíz y la cebada.
En concreto, la semana del 26 de septiembre, el Kg de carne de cerdo cotizó a 0,910 euros/Kg. vivo (151 Ptas./Kg), siendo su coste de elaboración de 0,950 euros/Kg (158 Ptas./Kg), continuando un descenso imparable que la ha situado a día de hoy a 0,813 euros /Kg (135 Ptas./Kg), lo que se traduce en que cada cabeza de ganado destinada a matadero, con unos 100 Kg de peso medio, acumula unas pérdidas para el ganadero de 12,59 euros (2.100 Ptas/cabeza), situación absolutamente insostenible para el sector.
Además de ello, la paulatina desaparición de mataderos y salas de despiece ha hecho que el sector dependa actualmente de muy pocos mataderos, que actúan cada vez más como auténticos oligopolios, dándose la circunstancia de que al no poder sacrificar todas las cabezas que se producen, éstas se mantienen en las granjas, consumiendo pienso y pasándose de peso, por lo que al llevarlas a matadero se producen descuentos que, en algunos casos, llegan hasta las 20 Pts./Kg. vivo, o lo que es lo mismo, casi 4.000 Ptas. por cabeza de ganado que pese más de 120 Kg.
Toda esta grave situación no se produce sólo en España, sino que se da, de una u otra manera, en toda la Unión Europea, debido a la subida alarmante del precio de los cereales ya mencionada, y a que sobre la enorme tasa de autoabastecimiento que tiene la UE (provocada también por la especulación por la avalancha de dinero procedente de otros sectores), han actuado tanto una disminución muy grande de nuestras exportaciones –a Rusia y Japón, principalmente-, como un aumento de las importaciones procedentes de países terceros, con exigencias medioambientales y de sanidad menores y a más bajo precio.
Estas circunstancias han hecho que las alarmas se han activado y que incluso la Comisión haya intentado salir al paso, aprobando el pasado lunes un régimen de ayudas al almacenamiento privado, que a juicio de COAG Murcia, es absolutamente insuficiente para atajar la actual crisis de precios, que lejos de ser coyuntural amenaza con transformarse en estructural. La retirada de 80.000 Tm, que es lo que se aprobó por la Comisión, representa retirar del mercado 1.095.000 cabezas, frente a las 140 millones que existen en la Unión Europea, para periodo de 3 a 5 meses, con una ayuda de aproximadamente 60 Ptas./Kg.
Esta medida, por sí sola, apenas resuelve nada pues lo que se retira del mercado no llega ni siquiera al 1% del total que se engorda en ese periodo de cinco meses. A juicio de Miguel Padilla, Secretario de Ganadería de COAG Murcia, “Las medidas que sí tendría una repercusión inmediata en la recuperación de los precios, sería activar los mecanismo que favorecieran las exportaciones a terceros países, así como adoptar soluciones por parte de la Administración que eviten el control abusivo de los grandes mataderos ejercen sobre el sector productor”.
COAG