Firmeza en la defensa de los intereses de nuestro sector agrario en los acuerdos comerciales de la UE con terceros países, esa ha sido una de las cuestiones principales que los representantes de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) han puesto sobre la mesa en la reunión mantenida el pasado día 10 de junio, con Alfredo Bonet, Secretario General de Comercio Exterior del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
La Comisión Europea está actualmente cumpliendo el mandato del Consejo para negociar por un lado una mayor liberalización comercial, casi completa (excepto para productos sensibles), con los países de EUROMED, (Egipto, Israel, Marruecos, Túnez, Jordania y Argelia) y por otro, el seno de la OMC, la reducción del arancel que se aplica a las importaciones de banana de los países ACP, África, Caribe y Pacífico.
Ante este panorama, Rafael Hernández, responsable de Relaciones Internacionales de COAG, Andoni García, miembro de la Comisión Ejecutiva estatal de COAG y Andrés Góngora, responsable del sector de frutas y hortalizas, han esgrimido los graves perjuicios que estos acuerdos bilaterales de liberalización comercial generan para productores y numerosas regiones europeas y por ello han reclamado compensaciones reales, a través de líneas de apoyo suplementario, y políticas a corto y medio plazo. “La experiencia nos dice que la liberalización sólo beneficia a las multinacionales agro-exportadoras mientras que perjudica a millones de agricultores en todo el mundo y no supone una rebaja del precio de los alimentos al consumidor”, ha afirmado Andoni García, miembro de la Comisión Ejecutiva estatal de COAG.
En el caso del plátano, los representantes de COAG han subrayado que es imprescindible mantener los aranceles actuales sobre las importaciones ya que esa situación será positiva tanto para los agricultores de Canarias como para los de los países terceros ya que se mantendrán los precios en el campo y los niveles de renta. “Una arancel por debajo de los 176 euros/Tonelada supondrá la puntilla para los productores de las Islas”, ha sentenciado Rafael Hernández responsable de Relaciones Internacionales de COAG y Presidente de COAG Canarias, a lo que ha añadido que “en la última década, la producción interna no dejó de perder peso en el mercado europeo, pese a los aranceles: si en 1999, el 20% del consumo en la UE correspondía a producción propia, el año pasado apenas superó el 13,3%.”.
En relación a los acuerdos con los países del EUROMED, Andrés Góngora, responsable del sector de frutas y hortalizas, ha instado al Secretario General de Comercio Exterior a presionar la Comisión Europea para que se condicione a apertura de los mercados europeos al cumplimiento de unos estándares mínimos en materia sociolaboral, ambiental y sanitaria, en beneficio de la seguridad alimentaria y de los consumidores europeos, pero también para lograr la mejora de las condiciones de vida y trabajo en los países terceros mediterráneos. Asimismo, ha recordado que calidad de las producciones europeas es elevada y los agricultores han de cumplir obligatoriamente numerosos requisitos medioambientales y sociales que tienen importantes repercusiones sobre los costes de producción. “Las autoridades comunitarias no deben olvidar que entre los principales objetivos de la Asociación Euromediterránea se encuentra el alcanzar un entorno seguro, transparente, predecible y de competencia leal entre los Estados que la conforman”, ha matizado Góngora.
En relación a ello, desde COAG se han planteado que la firma de los acuerdos vaya condicionada a unos rigurosos mecanismos de control y seguimiento para evitar situaciones como la de la presente campaña con el tomate de Marruecos, en la que los términos del acuerdo de Asociación entre el reino alauita y la UE se ha incumplido de forma reiterada tanto en precios de entrada como en cantidades.
COAG-IR Murcia