Remitido por UPA-A:
El Secretario General de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA-Andalucía, Agustín Rodríguez, forma parte, junto a Nicolás Chica (UPA-Granada) del recientemente constituido grupo de trabajo que se encargará de elaborar un programa de actuaciones que permita recuperar el olivar tras las graves heladas ocurridas en los meses de enero, febrero y marzo de 2005. Este grupo, constituido en la sede de la Consejería de Agricultura y Pesca, estará formado por representantes de este Departamento; miembros de UPA-A y otras organizaciones agrarias. Este Plan deberá estar listo antes del 15 de Mayo, contando con el consenso de la Consejería, sector agrario y Ministerio de Agricultura, para ser enviado a Bruselas, quien debe dar la autorización pertinente.
El principal escollo para que la UE autorice este Plan, según ha comentado el Secretario General de UPA-Andalucía, está en las ayudas directas —cofinanciadas por el Estado y la Consejería—, concretamente las ayudas a la amortización del capital de los préstamos.
En declaraciones a los periodistas y, tras recordar que “se ha puesto de manifiesto que la posición de unidad que mantenemos las Organizaciones Profesionales Agrarias, conjuntamente con las centrales sindicales, en la Plataforma por las Adversidades Climáticas es firme”, Agustín Rodríguez ha destacado que la elaboración de este Plan de Recuperación del Olivar abre el camino para que otros sectores afectados por las heladas y sequía —ganadería extensiva, subtropicales, flor cortada o cítricos entre otros— reciban ayudas.
En la reunión mantenida entre el Consejero del Ramo, Isaías Pérez Saldaña, OPAs y Sindicatos, se ha constatado la grave situación provocada en Andalucía por las adversidades climáticas. Los primeros datos reflejan daños de gran cuantía en Jaén, donde se perderán cerca de 12.000 toneladas del aceite al año y 22 millones de euros —descontando los 10,5 millones de euros percibidos por la Organización Común de Mercado (OCM)—; y Granada, donde se perderán 10.695 toneladas de aceite al año y 20 millones de euros —descontando las ayudas recibidas a través de la OCM—. Asimismo, en estas zonas altamente dependientes del cultivo del olivar se perderán 2 millones de jornales, a razón de 500.000 anuales.
Los esfuerzos de UPA-A se dirigen, según añade Rodríguez, a recuperar la capacidad productiva de las zonas realmente dañadas. Concretamente, según ha subrayado, cerca del 97% de las explotaciones afectadas tienen un máximo de 9 hectáreas. Es decir, la inmensa mayoría de las pérdidas, las sufrirán los pequeños olivareros.
La situación es tal que, según los datos aportados por Pérez Saldaña, 40.000 hectáreas de olivar de las Sierras de Jaén y Granada tendrán que ser arrancadas o sufrir podas exhaustivas, lo que mermará la producción durante, en el mejor de los casos, cuatro años. “El Grupo de Trabajo deberá confeccionar la fórmula para el cálculo de la ayuda, en función de los distintos niveles de daños: podas severas; podas a la cruz y arranque de olivos adultos, así como arranque de olivos jóvenes, etc.”, argumenta Rodríguez.
UPA-A