El alto cargo de la SGPM ha señalado que la producción pesquera mundial se eleva a 140 millones de toneladas, de las cuales el 32 por ciento corresponden a la acuicultura. Asimismo, ha indicado que el 90 por ciento de los productos comercializados son manipulados, procesados y transformados. En este sentido, ha precisado que Estados Unidos comercializa 700 especies diferentes, la Unión Europea 1.000 y España cerca de 900.
El control oficial que debe ejercerse sobre los productos pesqueros responde a las exigencias del consumidor en relación con la calidad y seguridad alimentaria, la información, el impacto medioambiental, la aparición de nuevos productos y la sanidad y bienestar animal.
En este marco, los Estados Miembros, de acuerdo con la normativa comunitaria, deben velar por el cumplimiento de la legislación alimentaria y los requisitos establecidos por la misma. Así, cada Estado Miembro debe preparar un único Plan Nacional de Control Plurianual Integrado, aplicable a todos los niveles (central, autonómico y local) y áreas relacionadas, en todas las etapas de la producción.
El Subdirector de Comercialización Pesquera ha explicado que, con el objetivo de aplicar de forma uniforme la legislación, se han desarrollado programas de control de los productos pesqueros con Andalucía, Canarias, Cataluña y Galicia, que han sido enviados al resto de las Comunidades Autónomas y cuya coordinación corresponde a la Dirección General de Estructuras y Mercados Pesqueros del MAPA.
Por otra parte, el alto cargo del MAPA ha resaltado el impulso dado por la Secretaría General de Pesca Marítima, con la participación de las Comunidades Autónomas, a las “Guías de Prácticas Correctas de Higiene”, desarrolladas por el sector pesquero en el marco de AENOR sobre pesca extractiva y acuicultura continental. En este aspecto, también ha anunciado la próxima aparición de la “Guía de Trazabilidad en la Pesca Extractiva” y la “Guía de Prácticas Correctas de Higiene de Acuicultura Marina”.
El Plan Nacional de Control de la Cadena Alimentaria, en el ámbito de actuación del MAPA, aprobado en Conferencia Sectorial en febrero 2007, tiene como objetivo prevenir, eliminar o reducir a niveles aceptables los riesgos alimentarios y proteger los intereses de los consumidores.
Mapa