A escala global, la demanda de energía de los países emergentes va a modificar el sistema energético, por lo que conviene hacer frente ya al incremento de las emisiones de gases de efecto invernadero. La UE, EE.UU. y Brasil han puesto en marcha políticas tendentes a reducir la dependencia energética del petróleo. El desarrollo de nuevos sistemas a partir de biomasa agrícola y forestal de la UE permite generar innovaciones y puestos de trabajo en
las zonas rurales; desarrollo que está siendo apoyado por la Política Agrícola Común de la UE.
Pekka PESONEN, secretario general del COPA y de la COGECA ha declarado con este motivo que « Es necesario reforzar y armonizar más las medidas encaminadas a desarrollar las fuentes de energía renovables, con el fin de llegar a una cuota de mercado del 20 % del suministro energético global de la UE, de aquí a 2020.
En opinión del COPA y de la COGECA, el suministro de biomasa agrícola y forestal está garantizado. La agricultura y la silvicultura de la UE-27 están lejos de su pleno potencial de producción.
COPA y COGECA