En un artículo anterior hablábamos sobre el control natural de plagas. Las crisopa es otro de los insectos que se utilizan para controlar varios tipos de plagas. Aunque los adultos subsisten a base de néctar y polen y son considerados unos de los insectos polinizadores más importantes, las larvas de crisopa se alimentan de principalmente de pulgones, aunque también de otras plagas como los trips, la araña roja, la mosca blanca y el prays del olivo. Las larvas de crisopa son incluso más voraces que las larvas de mariquita.
Los ejemplares adultos ponen sus huevos en las hojas. A los pocos días eclosionan y emerge un minúsculo depredador listo para alimentarse de su presa inyectando un veneno paralizador y absorbiendo el fluido interior. Adecuado tanto para cultivos al exterior, huertos e invernaderos, cada larva de crisopa puede devorar hasta 200 pulgones o huevos a la semana. Al cabo de dos o tres semanas construyen una crisálida de la que emergen los adultos al cabo de cinco días listos para repetir el proceso.