Remitido por Junta de Extremadura:
Este decálogo fue presentado durante la jornada titulada ‘Por un uso eficiente del AGUA en los regadíos’ que se ha desarrollado en las instalaciones de Feval en Don Benito (Badajoz). Las jornadas contaron con la asistencia del consejero de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura, José Luis Quintana; el director general de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), Francisco Amarillo; el presidente de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (SEIASA) de la Meseta SUR; Francisco Rodríguez; el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), José Ignacio Sánchez-Mora, el del Tajo, José Macías, y los presidentes de las 74 comunidades de regantes que hay en Extremadura.
Los mandamientos del decálogo aluden a aspectos como el ahorro y la optimización del agua, la mejora de las infraestructuras y sistemas de riego y la contaminación de acuíferos. En concreto ‘Los 10 mandamientos para un uso racional del aguad e riego’ son: «Ajusta el volumen de agua a las necesidades reales de riego», «Evita que los desagües se conviertan en ríos», «Ahorra el agua que te sobra hoy; resérvala para mañana», «Habilita infraestructuras de almacenamiento», «Respeta las franjas horarias óptimas para el riego», «Ataja las pérdidas por sistemas obsoletos y deteriorados», «Optimiza la gestión del riego para el máximo aprovechamiento», «Evita el arrastre de productos que contaminen el agua», «Aprovecha la nivelación de terrenos para optimizar los recursos» y «Mejorando la calidad de los productos agrícolas, el sector sale ganando».
De esta forma, según el presidente de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (SEIASA) de la Meseta Sur, Francisco Rodríguez, mediante los 30.000 ejemplares editados de este decálogo se pone a disposición de los regantes un «recordatorio de lo que pueden hacer para racionalizar el uso del agua. Además, el buen uso del agua también mejora la productividad de los agricultores.».
El consejero de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura, José Luis Quintana, reiteró una vez más que aunque el regadío afecta al 5.8 por ciento de la superficie agrícola regional, genera el 60 por ciento de la producción final agrícola. Por este motivo añadió que «tenemos que ser capaces de hacer un uso racional y eficiente del agua».
Quintana también anunció una inversión de 180.000 euros para la puesta en marcha de 30 cursos de formación de 40 horas lectivas cada uno destinados al perfeccionamiento del regante, que se impartirán en las zonas regables de la región y en época en la que los agricultores puedan asistir sin necesidad de tener que abandonar sus labores en los cultivos. El agricultor también dispone de la Red de Asesoramiento al Regante (REDAREX) desde la que se ofrece información sobre el riego con el objetivo de sacar el máximo partido posible al regadío.
COORDINACIÓN DE LAS ADMINISTRACIONES
Igualmente, el director general de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), Francisco Amarillo, destacó que la coordinación de las administraciones públicas en lo relativo al ahorro de agua «es muy grande y sobre todo dentro de la Administración Central». Por lo demás, Amarillo volvió a destacar las actuaciones previstas por el Gobierno para modernizar los regadíos e incidió en la necesidad de modernizar las comunidades de regantes y los sistemas de riego de las parcelas.
Por su parte, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, José Macías, destacó que en la modernización de los regadíos «es importante que se haga por todas las administraciones» ya que se conseguirá una «mayor eficiencia en el riego, mejor calidad de vida del campesino y mayor productividad y renta para el agricultor». Además, afirmó que «la modernización nunca se hará mediante la imposición al regante sino con su implicación».
En esta línea, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), José Ignacio Sánchez-Mora, destacó la posición de los regantes que desde «hace bastantes años han seguido la línea de la modernización de regadíos con vistas a ahorrar agua, poniendo dinero y realizando un esfuerzo importante para utilizar el agua de forma racional».
Por lo demás, durante la clausura de la jornada, el presidente de la SEIASA de la Meseta SUR advirtió que «un uso racional y un aprovechamiento óptimo de los recursos hídricos pasa por la modernización de las infraestructuras y regadíos obsoletos, que son responsables de importantes pérdidas de agua, miles de metros cúbicos diarios».
En este sentido, explicó que sólo en los últimos tres meses, SEIASA de la Meseta Sur ha firmado cinco convenios para la construcción y explotación de las obras de modernización de regadíos extremeños, correspondientes a las comunidades de regantes de las zonas regables del río Alagón, Valle del Jerte, Coria y las Vegas Altas del Guadiana.
Rodríguez Mulero hizo hincapié en la importancia del regadío en la economía nacional, ya que la superficie agrícola útil en España asciende a 26 millones de ha, de las que 3,3 millones corresponden a los regadíos responsables del 50% de la producción agrícola final.
Sin embargo, recordó que la tercera parte del regadío nacional (algo más de un millón de ha) cuenta aún con sistemas de riego obsoletos que superan los cien años de antigüedad. «Casi 750.000 ha se riegan con acequias de tierra y otras 400.000 ha con acequias de hormigón en mal estado», explicó.
SISTEMAS OBSOLETOS
En este sentido, añadió que se ha constatado que el cambio de sistema de riego o la reparación de infraestructuras hidráulicas aumenta la eficiencia del sistema de riego y el ahorro de agua, que medioambientalmente genera una serie de ventajas: menores extracciones de agua de los acuíferos o mayores caudales circulantes, disminución del consumo energético, etcétera.
El aumento de la capacidad de regulación permite que la demanda energética se realice en horas económicamente rentables para el regante, permitiendo al sector eléctrico rentabilizar sus estructuras productivas. En relación con el uso de fertilizantes, Rodríguez Mulero defendió que cuando se instalan sistemas de fertirrigación adecuados, se produce una disminución en la cantidad debido al mayor control en la aplicación, disminuyendo la contaminación de las aguas y la demanda energética para su fabricación.
El presidente de SEIASA de la Meseta Sur explicó que el principal programa del Plan Nacional de Regadíos es el de consolidación y mejora de sus infraestructuras. En la actualidad, el MAPA actúa en la consolidación y mejora de regadíos en más de un millón doscientas mil hectáreas.
El MAPA ejecutará, a través de SEIASA de la Meseta Sur, un total de 20 obras declaradas de Interés General en la Comunidad Autónoma de Extremadura con un presupuesto de inversión de 113.323.841 euros y una superficie a modernizar de 158.000 hectáreas repartidas a lo largo de un centenar de municipios. El número de regantes que se verán beneficiados por estas actuaciones asciende a 30.000.
En la actualidad, se encuentran en ejecución un total de seis proyectos por valor de 25,5 millones de euros, correspondientes a las comunidades de regantes de Vegas Altas I, Vegas Altas II, Badajoz-Canal de Montijo, Talavera la Real, Entrerríos y Canal de Orellana. Estas actuaciones beneficiarán en total a unos 8.465 regantes.
Junta Extremadura