La ceremonia tuvo lugar en la nueva Oficina Subregional de la FAO para Asia Central, que Diouf y Erdogan inauguraron oficialmente en Ankara. La oficina fue establecida el año pasado dentro del programa de descentralización de la FAO, con locales, personal y fondos cedidos por Turquía.
“Le ruego acepte la Medalla Agrícola como muestra de aprecio y respeto por parte de la FAO y de mi persona por sus loables esfuerzos a favor de la agricultura y la seguridad alimentaria de su país”, dijo Diouf al jefe de Gobierno turco.
Importante programa de reformas
Bajo el mandato de Erdogan, Turquía se ha embarcado en un importante proyecto de reforma agraria que ofrece incentivos directos a los campesinos con el objetivo de incrementar de forma significativa la producción y las exportaciones, mejorar los ingresos de la población rural y la seguridad alimentaria.
Diouf subrayó que Turquía es uno de los pocos países emergentes que participan directamente en operaciones de ayuda alimentaria, habiendo donado millones de dólares a través del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en los últimos años.
Entre los galardonados anteriormente con la Medalla Agrícola figuran el Rey Bhumibol Adulyadej de Tailandia, el Presidente francés Jacques Chirac, el Presidente chino Jiang Zemin, el papa Juan Pablo II, el Presidente egipcio Hosni Mubarak, el Primer Ministro español José María Aznar, y el Presidente alemán Johannes Rau.
Oficina Subregional para Asia central
La recién inaugurada Oficina Subregional para Asia Central ofrece asistencia técnica y en políticas agrícolas a siete países: Azerbaiyán, Kazajstán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán, Turquía y Uzbekistán.
La oficina cuenta con un equipo multidisciplinario de siete expertos de la FAO en diversas disciplinas, que contarán con el apoyo de jóvenes profesionales cedidos por Turquía en períodos rotatorios de dos años.
Conferencia internacional
Diouf participó también en una conferencia internacional con el título “Hacer que la globalización sirva a los países menos desarrollados”. En el encuentro, de tres días de duración, participaron más de 20 ministros de los países menos desarrollados, representantes de la ONU, expertos y figuras del mundo académico que debatieron los problemas y oportunidades que presenta la globalización para los países más pobres del mundo.
FAO