Director general Producción Agropecuaria participó en Cuenca en la reunión del proyecto’Crocusbank’

Nicolás: “El cultivo del azafrán puede ser una alternativa a nuestros campos”

En el pasado año 2005, Castilla-La Mancha cultivó 77 hectáreas de azafrán y recogió unos 800 kilos, lo que supone casi toda la producción de España.



El Centro de Investigación Agraria de Albadalejito (Cuenca), dependiente de la Consejería de Agricultura, acogerá el Banco Mundial de Recursos Genéticos del Azafrán y especies afines. La creación de este banco de germoplasma se enmarca en el proyecto europeo “Crocusbank” cuyo fin será recolectar, mantener, conservar y utilizar los recursos genéticos del azafrán y sus especies afines.

El director general de Producción Agropecuaria de la Consejería de Agricultura, Francisco Javier Nicolás, asistió hoy en la capital conquense a la sesión inaugural de este proyecto. Un acto en el que señaló que este proyecto permitirá preservar «la variabilidad genética de este cultivo y evitar que desaparezca en Europa».

Nicolás señaló que, con la Política Agraria Comunitaria y el desacoplamiento de las ayudas, “el cultivo del azafrán puede ser una alternativa a nuestros campos, al mismo tiempo que se evita su desaparición”.

El director general de Producción Agropecuaria manifestó que, a pesar del acuerdo sobre la calidad incuestionable del Azafrán de la Mancha, se ha registrado un importante descenso de la superficie dedicada a este cultivo que ha provocado una intensa erosión genética.

En el año 2005, Castilla-La Mancha cultivó 77 hectáreas de azafrán y recogió unos 800 kilos, lo que supone casi toda la producción de España. Sin embargo, en 2003 fueron 238 las hectáreas cultivadas y más de 2.800 los kilos obtenidos en todo el país, siendo el 98% de la producción castellano-manchega.

«El apoyo del Gobierno regional al azafrán ha sido muy importante porque en el año 2001 se creó el Consejo Regulador del Azafrán de Castilla-La Mancha, que persigue el aumento de este cultivo», concluyó.

Por su parte, el catedrático del Instituto de Desarrollo Regional de Albacete y Coordinador de este proyecto, José Antonio Fernández, explicó que la puesta en marcha de este Banco Mundial de Recursos Genéticos del Azafrán y Especies Afines pretende preservar la pérdida de diversidad genética que el azafrán está sufriendo a escala mundial, a excepción de países como Irán o la India.

Se trata de un proyecto financiado por la Comisión Europea con 2.634.169 euros. Durante hoy y mañana científicos de distintas instituciones celebran en Cuenca la primera reunión del mismo.

Son investigadores que pertenecen a la Universidad de Castilla-La Mancha (España), la Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha, la Universidad Agrícola de Atenas (Grecia), la Universidad Politécnica de Valencia (España), la Universidad Kastamonu (Turquía) y la empresa Tradimpex JM Thiercelin de París (Francia).

También a la Universidad de Catania (Italia), la Universidad de Drebecen (Hungría), el Instituto Nacional Politécnico de Toulose (Francia), la Universidad inglesa de Leicester, la Fundación Nacional para Investigación Agrícola de Grecia, la Academia de Ciencias de Azerbaiyán y el Centro Nacional de Investigaciones de El Cairo (Egipto).

En esta primera reunión inaugural también estuvieron presentes el delegado de la Junta en Cuenca, Luis Carlos Sahuquillo; el delegado provincial de Agricultura, Rodrigo Molina; el director académico del Campus de Cuenca, Javier de León; y el director de la Escuela de Ingenieros Agrónomos de Albacete, Francisco Montero.

Junta Castilla-La Mancha

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