Diseñan una planta de biogás a partir de paja de cereal

El biogás es un gas combustible formado por una mezcla de metano y dióxido de carbono que se obtiene mediante un proceso denominado digestión anaerobia. Además de la obtención de biogás, el proyecto tiene como objetivos “fomentar el empleo de las energías renovables en Castilla y León, aprovechar los residuos agrícolas para la producción de energía, desarrollar un proceso sostenible que permita la reutilización de todos los residuos y subproductos de la planta y seleccionar el pretratamiento de la paja de cereal más adecuado para maximizar la producción de biogás”.

Tal y como recuerda la joven investigadora, Castilla y León es la comunidad con mayor potencial de recursos bioenergéticos, cuenta con una gran superficie agrícola y forestal y tiene un importante desarrollo de sus industrias asociadas. Así, el proyecto surge de la posibilidad de valorizar energéticamente este potencial de biomasa. El biogás obtenido es apto para la cogeneración eléctrica y tiene un poder calorífico “de 8’6 kilovatios hora por metro cúbico”. Tras un estudio de la distribución de la paja de cereal por la región se decidió que la planta podría ubicarse en Villalón de Campos (Valladolid), “donde mayor cantidad de paja de cereal existe”, y a su vez, un lugar céntrico “para optimizar el proceso de transporte y logística”.

Respecto al proceso de obtención, Beatriz Simón detalla que paja de cereal llega a la planta en camiones y se deposita en un silo de almacenamiento para siete días. Además, en la región habría otros silos intermedios distribuidos. Antes de pasar al pretratamiento, “es necesario acondicionar la paja de cereal y hay que disminuir su tamaño de partícula por medio de un molino y humedecerla”. El pretratamiento se realiza por explosión de vapor y tiene lugar en un reactor en el que la biomasa se somete a 230 grados centígrados durante dos minutos, de forma “que se consigue que sea más accesible para el posterior proceso de digestión anaerobia, que es donde se obtiene el biogás”.

La parte más innovadora del trabajo radica en que se separan los tres carbohidratos presentes en la biomasa lignocelulósica que abandona el reactor, la celulosa, hemicelulosa y lignina, ya que la lignina “es perjudicial para el proceso de digestión anaerobia”. No obstante, la lignina se recupera ya que tiene diferentes aplicaciones en la industria química y servirá “como una fuente de ingresos adicional de la planta”.

Para separar los tres elementos se realizan dos lavados consecutivos, el primero con agua caliente, con el que se consigue separar ya la hemicelulosa (que se solubiliza en el agua) y el segundo un lavado alcalino en el que se separa la celulosa de la lignina. La hemicelulosa y la celulosa pasan a la fase de digestión anaerobia, donde un se produce el contacto anaerobio en un reactor y se obtiene el biogás tras un tiempo de retención de sólidos de 12 días. Aparte del biogás se obtiene un residuo sólido que se va a vender como fertilizante compost, como prevé el trabajo.

Sinc

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